El jueves 16 de septiembre se dio a conocer el deceso de Mario Roberto Morales. La noticia fue confirmada por sus familiares en una publicación realizada desde el perfil de Facebook del autor.
De acuerdo con allegados de Mario Roberto, el escritor fue internado en un hospital privado durante la segunda semana de septiembre debido a complicaciones por covid-19, pero después fue trasladado al Hospital Especializado de Villa Nueva.
“Ante esto necesitamos blandir nuestra propia fortaleza espiritual y moral para que la lucidez prive sobre la locura y hagamos lo único posible de hacer: cuidarnos mucho y pasarla bien”.
Mario Roberto Morales, quien además es recordado por muchos como un importante intelectual del país, se caracterizó por establecer una crítica frente a la operatividad de la sociedad desde formatos escritos como la novela, la poesía, los ensayos, las columnas de opinión o los relatos.
El intelectual transitó por varias temáticas que le valieron un gran acervo. Entre los campos que investigó destacan la literatura, política, filosofía, cultura y el arte en distintas expresiones.
Mensajes de duelo
En una publicación realizada desde Facebook, el también Premio Nacional de Literatura Francisco Morales Santos y quien se ha destacado por su labor detrás de la Editorial Cultura, recordó a Mario Roberto la mañana del 16 de septiembre como “uno de los grandes narradores guatemaltecos” y como a un “revolucionario íntegro”.
Desde un comunicado emitido en redes sociales, la bancada del Movimiento para la Liberación de los Pueblos lamentó el fallecimiento del autor, a quien se destacó por permanecer “a lo largo de su vida, en el lado de las causas de los pueblos”.
El expresidente de Guatemala, Alfonso Portillo, también expresó su dolor y tristeza por la partida de Mario Roberto en Facebook. El exmandatario destacó la “inteligencia e independencia al servicio de este país” del autor.
La antropóloga Marcela Gereda publicó: “Mario Roberto defendió el derecho a la alegría, intentó unir generaciones, comprender y compartir por qué el mundo es cómo es y sobre todo por qué somos como somos”. Gereda agradeció al autor por abrir las puertas de su casa “para estudiar este país”.
“Se fue uno de los últimos intelectuales a manera de sabio renacentista”, expresó Gerardo Guinea Diez, escritor y director de la editorial guatemalteca Magna Terra. Guinea Diez compartió que había conocido a Morales Santos en México hacia principios de la década de 1990. Desde entonces habían trabajado en varias ocasiones y en la actualidad trabajaban en un proyecto de la Colección Bicentenario de la Universidad de San Carlos de Guatemala.
Por otra parte, el también escritor Maurice Echeverría manifestó en su cuentas de redes sociales: “Se ha muerto un auténtico intelectual en un país que no los tiene.”
Vida y labor en la intelectualidad
Mario Roberto Morales nació en la ciudad de Guatemala el 5 de septiembre de 1947. Durante su niñez vivió y estudió hasta tercer año de primaria en Santa Lucía Cotzumalguapa (Escuintla). Luego complementó sus estudios de primaria y secundaria en la ciudad capital.
Ingresó a la Universidad Rafael Landívar en 1966. Allí estudió la licenciatura en Letras y Filosofía. Durante su tiempo como universitario se vinculó con estudiantes de Humanidades y Derecho de la Universidad de San Carlos de Guatemala, y se acercó a la lucha revolucionaria. Según su biografía, también participó en la lucha ideológica a través medio del periodismo.
Obtuvo una beca para estudiar Historia del Arte en la Universidad de Florencia (Italia). Regresó a Guatemala en 1975 y se vinculó a la Universidad de San Carlos de Guatemala como profesor de la Escuela de Ciencias Psicológicas. En 1988 recibió una beca de la Universidad de Costa Rica para estudiar una Maestría en Sociología Centroamericana.
En 1992 trabajó en Guatemala como Asesor Cultural de la Dirección General de Extensión Universitaria y en esa época fundó Radio Universidad donde se abordaban temas de actividad cultural, de debate político y artístico. Dos años después, realizó un Doctorado en Cultura y Literatura Latinoamericanas en la Universidad de Pittsburgh.
También fue profesor del Departamento de Lenguas Modernas de la Universidad del Norte de Iowa, y de su Programa Internacional de Posgrado en Literatura Española e Hispanoamericana.
En 2007, recibió el Premio Nacional de Literatura “Miguel Ángel Asturias”. Ese mismo año ingresó como miembro de número a la Academia Guatemalteca de la Lengua, correspondiente de la Real Academia Española.
En 2017, se le otorgó el Doctorado Honoris Causa de la Universidad de San Carlos de Guatemala, por su trayectoria intelectual, literaria y académica. Recibió otros reconocimientos como el Premio Centroamericano y del Caribe de Novela en 1971; el Premio Único Centroamericano de Novela de la Dirección General de Cultura y Bellas Artes de Guatemala en 1977; y el Premio Latinoamericano de Novela EDUCA en Costa Rica, en 1986.
Además de publicar ensayos académicos, libros de poesía, de narrativa y libros escolares, fue columnista en varios medios de comunicación nacionales, entre ellos Prensa Libre. Muchas de sus publicaciones se pueden encontrar en su blog.
Entre sus libros se destacan:
- La debacle
- El libro de las relaciones olvidadas
- Los demonios salvajes
- El esplendor de la pirámide
- Señores bajo los árboles
- Los que se fueron por la libre
- El ángel de la retaguardia
- Obraje
- Jinetes en el cielo
- La cultura de la violencia
- El método de la ciencia
- La ideología y la lírica de la lucha armada
- La articulación de las diferencias o el síndrome de Maximón
- Breve historia intercultural de Guatemala
- Estética y política de la interculturalidad: el caso de Miguel Ángel Asturias
- Epigramas para interrogar a Patricia
- Epigramas
- Epigramas de seducción y rituales para purificarse