"Vergüenza". Con esta palabra definió Jonathan Marcus, corresponsal de defensa y diplomacia de la BBC, la decisión de Estados Unidos de suspender de manera temporal todos los vuelos de F-35, el programa de armas más grande y costoso de su tipo en el mundo.
Toda la flota de F-35 del ejército de EE.UU., y de sus socios internacionales, estará en tierra mientras completan las inspecciones técnicas “entre las próximas 24 a 48 horas”, según dijo un comunicado de la Oficina del Programa Conjunto F-35.
Estas inspecciones se hacen después de que un F-35B sufriera un accidente en Carolina del Sur el mes pasado. El piloto logró salir expulsado antes de que la nave se destruyera.
“El problema ya ha sido identificado. Se trata de tubos de combustible defectuosos. Una vez que se revisen o reemplacen, la aeronave volverá al aire”, afirma Marcus.
“Si se encuentran instalados tubos de combustible defectuosos, se retirarán y se reemplazarán. Si ya se han instalado tubos de combustible en buen estado, esos aviones volverán a sus operaciones de vuelo”, dijo la oficina del programa.
Se espera que el programa del F-35 dure varias décadas y se proyecta que las ventas globales sean de 3.000 aeronaves.
Cada una tiene un valor de US$100 millones, puede aterrizar verticalmente, utiliza tecnología de sigilo para reducir su visibilidad al radar, un sistema de comunicación que permite que los datos se compartan con rapidez con los comandantes de las operaciones y viene en tres modelos diferentes.
Según Marcus, el F-35 “representa un cambio radical en la capacidad [militar de EE.UU], pero su complejidad inevitablemente ha generado problemas”.
La oficina de responsabilidad del gobierno de los EE.UU. estima que todos los costos asociados con el proyecto ascenderán a un billón de dólares.
Marcus afirma que, si bien sus costos por aeronave están bajando, todavía hay dudas sobre cuántos aviones puede costear EE.UU.
“También está sobre la mesa la decisión de si deberían comprar una aeronave más barata y menos capaz, junto con el F-35”, afirma el corresponsal.
El avión es fabricado en EE.UU. por la compañía Lockheed Martin, pero incluye piezas fabricadas en otros países.
Varias naciones ya lo han comprado, entre ellas Reino Unido, Israel, Japón, Italia, Turquía y Corea del Sur.
El F-35 fue utilizado por primera vez en combate por Israel a principios de este año para llevar a cabo dos ataques.
Un informe oficial ya había cuestionado a principios de este año si el F-35 estaba listo para el combate, después de que se encontraron docenas de fallas.