Un juicio contra un sacerdote católico por abusos sexuales de siete menores de edad se inició en la ciudad argentina de Paraná, informó este martes un excura, quien renunció a la Iglesia al conocerse el escándalo en 2012.
“Las víctimas tenían entre 13 y 14 años. Estaban internadas en el seminario de menores, entre 1985 y 1993. La familia los veía una vez al mes, estaban aislados, y la gente depositaba su confianza en el cura”, dijo el exreligioso José Dumoulín al canal de noticias TN.
La primera audiencia del juicio se realizó el lunes en Paraná, a 600 km al norte de Buenos Aires. El acusado es Justo Ilarraz, quien era prefecto de disciplina y guía espiritual en el Seminario Arquidiocesano de la ciudad, capital de la provincia de Entre Ríos (nordeste).
“La denuncia se conoce en 2012 por la revista Análisis. Los niños no hablaban porque pensaban que no les iban a creer”, dijo Dumoulín, quien dejó los hábitos desencantado por los hechos que se narraban.
Ilarraz fue apartado del seminario en 2012 al iniciarse una investigación interna por orden de las autoridades eclesiásticas. Hasta el momento no fue expulsado de la Iglesia, pero ante el tribunal comparece vestido con ropa civil, sin sus hábitos.
Siete víctimas habían declarado en el proceso de instrucción previo a las audiencias, ante el procurador general, Jorge García.
Sin embargo, los investigadores sospechan que puede haber más casos de abusados que se mantienen en silencio, según fuentes judiciales citadas por la prensa local.
Las audiencias se realizan a puertas cerradas por disposición del tribunal. Se espera un veredicto hacia mediados de mayo.
Con información de: © Agence France-Presse