En esta forma indiscutible, el once aurinegro que comandó Rubén Amorín Matos, se llevó los máximos honores al conseguir el título de campeón interclubes del balompié centroamericano, organizado anualmente por la Confederación Norte, Centroamérica y el Caribe de Futbol (CONCACAF)
El Olimpia como cuadro local, tuvo que aceptar la división de puntos con un autogol de un defensor del equipo militar. En esta ocasión, durante la semana se rumoró con insistencia en los círculos deportivos nacionales la ausencia obligada de Jorge “el Grillo” Roldán en las filas del Aurora.
Y como dijo el director técnico del once aurinegro, resultaría muy difícil llenar la camisola del número 10 del Aurora y de la selección nacional. Lo anterior provocó en el ánimo del aficionado nacional un poco de desconsuelo.
Sin embargo, en la alineación el día del partido no se sintió la ausencia del Grillo Roldán, ya que Oscar Molina salió con la función de buscar la corriente entre la línea de defensa y el ataque y darle al cuadro la consistencia necesaria, aquietando el esférico en los momentos de apremio.
Lo anterior, unido a un planteamiento acertado de Amorín, condujo al Aurora, tricampeón nacional y monarca del circuito centroamericano, a un claro dominio territorial ejercido sobre el Olimpia durante la mayor parte del encuentro.
Dominio
En algunas ocasiones en el futbol, cuando un equipo se nota asentado en sus líneas, hace sentir en el aficionado la esperanza del triunfo. El Aurora en el choque dominical, desde el primer minuto de lucha, dio la impresión de que iba dispuesto a la victoria y con clara superioridad.
Sus desplazamientos iniciales, avances bien gestados, su dominio sobre la zona crucial en el medio terreno y el poder en la línea defensiva, desbarataron al cuadro visitante, que no pudo en ningún momento realizar su juego.
Planteamientos
El equipo militar insinuó un 4-3-3, que rindió los frutos deseados. La zona defensiva siempre atenta, solamente con algunos problemas en el inicio del partido por el sector izquierdo, en donde Amorín ha tenido obligadamente que colocar a Lijón León de León, como marcador de punta derecha, una posición poco acostumbrada para el zaguero central del seleccionado nacional.
Por lo demás, en el centro y lateral derecho no hubo ningún problema, ya que la zaga estuvo respaldada por la seguridad, atención y buena ubicación del arquero, Ignacio Santos.
En la media cancha actuaron en buena forma Molina, Sergio Arias, hasta el minuto 45 cuando salió por lesión, y Salvador Pericullo. Y en la delantera sembraron la confusión en la retaguardia del Olimpia los avances gestados
en velocidad por Balboa, Recinos y Alemán.
El visitante
El once visitante trató de jugar un 4-2-4, que fue superado ampliamente por el Aurora. El Olimpia mostró una línea defensiva errática, especialmente por el centro; los volantes no pudieron apoyar a sus compañeros de ataque, quienes se vieron superados por la fuerte marca de la defensa del campeón nacional.
Con toques cortos, precisos y el hombre mejor colocado, el Aurora se presentó en repetidas ocasiones frente al guardameta Morales.
Primer gol
Corrían 16 minutos cuando Arias filtró un pase en profundidad a Reginaldo Alemán, quien avanzó con velocidad superando los errores de los centrales del Olimpia. Cuando se encontraba frente al arquero soltó tiro colocado, que señaló la primera anotación para el Aurora.
En dos ocasiones posteriores el equipo militar tuvo la oportunidad de aumentar las cifras en el marcador, pero «Escopeta» Recinos falló a la hora de la verdad. El Aurora siguió con el claro dominio en toda la línea. El Olimpia a duras penas logró rebasar a la fuerte zaga del Aurora, pero los disparos fueron suaves o desviados. Así concluyó la primera parte.
Segundo gol
Al minuto 11 el árbitro salvadoreño Leonel Bojórquez, quien tuvo una actuación discreta, castigó al Olimpia con tiro indirecto que fue cobrado en corto por Molina a Frank, quien sobre la marcha despidió tremendo disparo que superó a la barrera del Olimpia y al guardameta Morales, quien se lanzó sin contener el shutazo del zaguero militar.
Tercer gol
Habían apenas transcurrido dos minutos más cuando Reginaldo Alemán se filtró por el sector derecho; fue derribado dentro del área, pero logró habilitar a Balboa, quien con tiro a media altura colocado a una esquina decretó la tercera caída del campeón hondureño.
Cuarto y último gol
Minuto 15, el avance personal de Reginaldo Alemán, quien en velocidad se le fue a la zaga central del Olimpia; sobre la marcha destapó violento shutazo, que señaló la cuarta y última conquista para el tricampeón nacional.