Las panaderías inician la producción del pan de recado el Lunes Santo, puesto que los pobladores prefieren hacer su pedido con tiempo, para no correr antes de que cierren los negocios el Jueves Santo. Sin embargo, sin importar que tengan pedidos, existen panaderías abiertas en esta fecha.
Una de estas es la panadería Don Taco, en la 5a. calle 9-70, barrio Monterrey, zona 4, donde funciona desde hace 45 años.
Plutarco Rafael Sánchez, de 66 años y propietario del negocio, considera que la tradición de consumir este pan en la Semana Mayor continúa firme, y no acostumbran trabajar solo con pedidos.
Lo necesario
“Las personas vienen y compran la cantidad de pan que necesitan, y nosotros tenemos la certeza de que no sobrará ni hará falta”, expresó Sanchez, originario de San Juan Ixcoy, Huehuetenango, y que vive en Retalhuleu desde hace 21 años.
Explicó que los precios varían, desde el más pequeño que pesa dos onzas, que cuesta Q1, hasta el de 10 onzas, de Q10. Refirió que la receta del pan de recado se diferencia de la del normal porque se agrega huevos, leche y margarina. Pero don Plutarco, a quien los vecinos le llaman don Taco, considera que lo que el sabor especial es porque para su cocción no utilizan los modernos hornos eléctricos, sino mantienen la costumbre de utilizar el horno artesanal —de ladrillo—.
El panificador Wálter García, que lleva 14 años de laborar con don Taco, dijo que los panes grandes son los que se acostumbran compartir entre vecinos, y los pequeños para el consumo individual.
Pan dormido
Jesús Saquic, de San Sebastián, recordó que hasta hace unos años se acostumbraba consumir para estas fechas un tipo de pan conocido como dormido, pero ahora, son pocas las panaderías que lo producen. La vecina Irma Samayoa aseguró que el pan de recado es delicioso, y eso hace que no se pierda la tradición de comerlo durante Semana Santa.
La receta
Los panes de recado son elaborados con:
- Harina de trigo, margarina, manteca vegetal, huevos, levadura, royal, queso y leche.
- Proceso: se bate la harina con la leche, se agrega el resto de ingredientes y se deja reposar para que actúe la levadura y el royal.
- Con la masa se hacen bolas, y se les deja en reposo, para después aplastarlas y decorarlas con concha, pasas, ajonjolí y polvorón.
- Se cocinan en horno artesanal, de 15 a 18 minutos.