Prensa Libre publicó el 26 de julio de 1954 que “el próximo sábado treiuntiuno de los corrientes entrará en vigor el nuevo precio de la gasolina, de treinta centavos de quetzal por galón”.
El incremento fue autorizado por la Junta de Gobierno, tomando en cuenta que ya Jacobo Árbenz Guzmán había sido derrocado.
El subsecretario de Economía, doctor Mirón Porras (no se consigna nombre en la nota) informó que la medida apunta a salvaguardar la economía de los guatemaltecos, y que solo se esperaba la aprobación del Ministerio de Hacienda.
Según instrucciones de Mirón Porras, a las 7 horas del 31 de julio se levantará un inventario del combustible existente en el país, y luego cada expendio procederá a comercializar el carburante al precio ordenado.
Uno de los aspectos más interesantes de la nota es aducir que ninguno de los propietarios de estaciones de gasolina podría aumentar los precios tope decretados por la Junta de Gobierno.
El inventario de combustible, dijo entonces Mirón, no debería llevarle al Gobierno más de dos horas.
Durante ese lapso ningún expendio podía vender gasolina, so pena de ser clausurado.
El panorama político del país todavía estaba en ciernes respecto de la Presidencia del país, aunque Carlos Castillo Armas ya había tomado posesión luego del golpe de Estado contra Árbenz Guzmán.
Una nota interesante publicada el 28 de julio del mismo año indica que el sindicado patronal de industriales de Guatemala pide al Gobierno que ya no autorice la construcción de más gasolineras, por temor a que las existentes quiebren.
Lo anterior fue una manifestación de temor ante el auge que el mercado de la gasolina experimentaba.
UN PRODUCTO VOLÁTIL
Precios actuales
En los primeros seis meses de 2015 la gasolina regular aumentó 27.6% respecto a enero, mientras la superior subió 25.8% en ese mismo período, reportó el Ministerio de Energía y Minas (MEM).
El diésel aumentó 10.2%.
Las cifras estadísticas del MEM revelan, no obstante, que comparado con junio del año pasado, el diésel es ahora más barato en un 31.4%; la gasolina regular bajó 25.1% de precio, y la superior ha bajado un 24%.
Sin embargo, la gasolina, en sus versiones regular y superior, se mantiene entre Q25 y Q28, sin tomar en cuenta que miles de galones son vendidos en el mercado negro a mucho menos que esos precios.
Uno de los factores que más afecta es el contrabando de combustible, un mercado floreciente sobre todo en el occidente del país.
¡Cuán lejos están estos precios de los de la década de 1950!