Terremoto del Mundial de 1970
El 31 de mayo de 1970 se iniciaba uno de los acontecimientos más esperados, la Copa Mundial de Fútbol. Los peruanos se encontraban pendientes del partido México versus Rusia, pero ese entusiasmo se vio interrumpido a las tres de la tarde, hora local, por un fuerte movimiento telúrico de intensidad 7.5 en la escala de Richter que estremeció la zona costera del país y destruyó varias poblaciones del Perú.
La tragedia no quedó en el sismo y los daños producidos en las áreas urbanas; al norte de Lima dos ciudades desaparecieron completamente al producirse un alud proveniente del monte Nevado del Huascarán. El sismo quebró una parte de hielo y rocas de la cima del monte convirtiéndose en una colosal ola de lodo y piedras que sepultó a las poblaciones de Yungay y Huaraz, y donde murieron más de 80 mil personas.
Managua destruida
La noche previa a la Nochebuena de 1972, muchos managüenses se preparaban a celebrar la Navidad, en las calles se respiraba un ambiente familiar por las cercanas fechas. No imaginaban el desastre que ocurriría a la medianoche del 23 de diciembre.
Un fuerte terremoto de 8.5 grados Richter azotó el centro de la capital nicaragüense, destruyendo en su totalidad la mayor parte de la ciudad, asentada en la orilla del Lago de Managua.
Un 90% de la capital fue destruida a raíz del sismo, con epicentro en el lago de Cocibolca, a inmediaciones de Managua y que activó tres fallas que atraviesan la ciudad. De inmediato se ordenó la evacuación total de la capital. Se calculó que aproximadamente 400 mil sobrevivientes salieron de la destruida ciudad cuyo ambiente era dantesco. Similar al terremoto que había destruido la antigua ciudad en 1931.
El conteo final de muertos sobrepasó los veinte mil y doscientos mil damnificados, y hubo daños millonarios en infraestructura. Se barajó trasladar la ciudad a otras zonas cercanas pero quedó finalmente en un área cercana a la vieja Managua.
El sismo que estremeció a China
La madrugada del 28 de junio de 1976, meses después de que el Terremoto de San Gilberto golperara a Guatemala, se producía uno de los sismos más destructivos del siglo, en la región de Tangshan, al este de Pekín, China.
El sismo fue registrado con una intensidad de 8.2 grados en la escala de Richter, con epicentro debajo de esta gran ciudad industrial de más de un millón de habitantes. Dos réplicas de 7 grados Richter terminaron de destruir la ciudad completamente. El saldo final fue de más de doscientos mil muertos, pero otras fuentes llegan a asegurar que el terremoto cobró la vida de más de setecientas mil personas. Por ese motivo y la destrucción generada se le considera el más mortal de la segunda mitad del siglo XX.
México herido de muerte
El amanecer de muchos mexicanos el 19 de septiembre de 1985 fue trágico al producirse el peor terremoto en la historia de su país, un sismo de 7.8 grados Richter cuyo epicentro fue a más de 300 kilómetros al sur este de la Ciudad de México en las costas del Estado de Guerrero, en el Pacífico.
La gran ciudad capital de México, una de las más pobladas del mundo, contaba con al menos diez millones de habitantes en ese entonces, fue golpeada fuertemente en su infraestructura, al colapsar más de 700 edificios tanto modernos que albergaban oficinas y otros como multifamiliares en cuyos restos quedaron miles de personas, además más del 35% de construcciones antiguas quedó destruido.
El saldo trágico de este terremoto fue de más de 20 mil muertos, según dato aproximado, ya que muchos cuerpos no pudieron ser rescatados de entre los escombros de numerosos edificios destruidos.
Causó polémica la denuncia de varios sectores por corrupción en la aplicación de controles de construcción, ya que gran parte de edificios modernos, escuelas y hospitales de reciente construcción no soportaron el terremoto y dejaron al descubierto la falta de aplicación de controles de construcción en zonas sísmicas. Al final no prosperó ningún proceso penal.
El día que se cayó el Divino Salvador
El 10 de octubre de 1986 un fuerte sismo se produjo en el centro de El Salvador afectando a la capital, San Salvador, y por cuya fuerza sucumbieron varios edificios; muchos de estos habían resistido el terremoto de 1965 pero no fueron reparados correctamente.
Gran parte de colonias cercanas al centro de la ciudad, como San Jacinto, una de las más antiguas y pobres de la ciudad, quedaron reducidas a escombros, ya que sus construcciones eran de bajareque. Casos particulares fueron el desplome del edificio Rubén Darío, una estructura de 5 pisos y que ocupaba casi una manzana . En ese lugar murieron aproximadamente 500 personas.
Otro caso triste fue el de la escuela Santa Catalina, en el barrio San Jacinto, donde perecieron 42 niños que se encontraban estudiando. Además, el emblemático monumento al Divino Salvador del Mundo quedó parcialmente destruido al caer de su base.
El saldo final de muertos por el terremoto fue de mil 500 y más de 50 mil damnificados.
Dolor en Turquía
Varios sismos han afectado Turquía, en la confluencia entre Europa y Asia. El 17 de agosto de 1999, un sismo de 7.8 grados Richter estremeció el territorio turco, con epicentro en la ciudad de Izmit. La falla de Anatolia, que provocó el movimiento telúrico, mide 1000 kilómetros y atraviesa el país.
El saldo final del terremoto fue de 17 mil muertos y medio millón de damnificados.
Catástrofe en Haití
El 12 de enero de 2010 ocurrió la catástrofe más grande en Haití, país azotado por la pobreza e inestabilidad política desde hace décadas. Un terremoto de 7.0 grados Richter azotó la isla de la Española, del lado de Haití. Este es uno de los terremotos más fuertes que han ocurrido en el área, siendo sensible en República Dominicana y Puerto Rico.
El desastre fue de una magnitud muy fuerte y destruyó la mayoría de edificios e inmuebles públicos, como el palacio presidencial y la Catedral de Puerto Príncipe.
En la catástrofe murieron aproximadamente trescientas mil personas, entre las que se contaban varios funcionarios de la ONU que estaban en misión de paz en la Isla. Unos 1.5 millones de damnificados quedaron sin hogar, lo cual agravó aún más la situación económica de esa nación caribeña.
Doble desastre estremeció a Chile
Tan solo un mes después del terremoto que destruyó gran parte de Haití, otro potente sismo sacudió el territorio de Chile en América del Sur en la madrugada del 28 de febrero de 2010. El sismo fue registrado con una magnitud de 8.8 grados en la escala de Richter siendo considerado como el segundo terremoto más fuerte en la historia de este país y uno de los más fuertes en la historia de la humanidad. Es superado únicamente por el terremoto de Valdivia, siempre en chile que ocurrió en 1960 con una magnitud de 9.5 grados Richter.
El terremoto de 2010 fue de una magnitud fuerte que se sintió en gran parte de sudamérica. Fue tal la fuerza que de acuerdo con los registros deposicionamiento global algunas ciudades como Concepción, Santiago e incluso Buenos Aires se movieron desde 27 centímetros hasta 3 metros de su posición original e incluso alteró la rotación del planeta.
Gracias a las redes sociales los primeros daños comenzaron a conocerse en todo el mundo casi de inmediato. El panorama era dantesco, muchas obras de infraestructura vial destruidas, edificios de construcción moderna seriamente dañados, lo cual no fue tanto el daño en comparación del sismo de Haití, ya que Chile posee legislación en tema de construcción lo cual evitó que la catástrofe fuera mayor. Muchas construcciones en el área rural fueron también afectadas en mayor número.
El desastre no quedaría en el sismo y las siguientes réplicas que se produjeron, treinta y cinco minutos después del primer gran temblor un fuerte tsunami impactó las costas chilenas sorprendiendo a miles de personas que se encontraban entre los escombros. Se atribuyó a errores de logística de los organismos encargados el no haber avisado oportunamente sobre el tsunami. Minutos después la alerta se extendió a más de cincuenta países en la costa del océano pacífico sin reportarse mayores daños. Este desastre terminó con destruir gran parte de las construcciones afectadas principalmente en las zonas costeras del centro de Chile.
Los daños de este sismo se cifraron en medio millón de viviendas destruidas, otro millón y medio dañadas, 2 millones de damnificados y más de 500 fallecidos.
Cinco años después, el 16 de septiembre de 2015 otro potente terremoto de 8.4 grados de magnitud estremeció el norte de Chile causando pánico nuevamente y sucedido de un maremoto con olas de hasta 5 metros que llegó a internarse en el centro de poblados costeros como Illapel, Tongoy y el puerto de Coquimbo. La alerta fue acatada por al menos un millón de personas que se situaron en sitios altos para resguardarse del Tsunami. Al cierre de esta nota se contabilizaban 10 fallecidos por este sismo.