Los árboles dan tanto jugosas piezas como motivos para reflexionar sobre la conservación del patrimonio agrícola.
Pero principalmente Van Aken quiere que sus árboles provoquen una respuesta. Se ha instalado en un vivero en el campus donde hace sus injertos con variedades antiguas y difíciles de encontrar y otras heredadas, algunas de un viejo invernadero de investigación.
Ha recolectado más de 40 variedades de ciruelas, melocotones, nectarinas, albaricoques, cerezas y almendras que puede incorporar a sus creaciones.