El diplomático coreano recordó que 18 mil personas están atrapadas en la zona y se enfrentan a una “espada de doble filo” , con extremistas del Estado Islámico (EI) y otros grupos dentro del campo y las fuerzas del Gobierno sirio fuera.
“Es el momento de una acción concertada para salvar vidas y restaurar un mínimo de humanidad” , dijo Ban, que insistió en que el mundo “no puede quedarse a un lado y ver cómo se desarrolla una masacre”.
Teme asalto
Ban habló a los periodistas en una conferencia de prensa convocada de urgencia en medio de temores de que se lleve a cabo un asalto masivo contra el campo, que actualmente está controlado en gran parte por el EI.
Según la ONU, los residentes de Al Yarmuk, incluidos tres mil 500 niños, están siendo utilizados como “escudos humanos” , cuando deberían estar siendo protegidos por las partes en conflicto.
Ban explicó que está manteniendo contactos con líderes internacionales para que presionen a los dos bandos con el fin de que garanticen la seguridad de los refugiados, permitan la entrada de ayuda humanitaria y faciliten la evacuación de quienes quieran salir de la zona.
Al menos 47 personas han muerto desde el inicio del ataque del EI el pasado 1 de abril en Al Yarmuk, según informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Antes del inicio de la guerra en Siria hace cuatro años, vivían en el campo unos 160 mil civiles, de los que solo quedan 18 mil.
Desde el pasado día 1, no ha entrado ningún tipo de ayuda humanitaria al lugar.
Pide acceso inmediato
El Comité Internacional de la Cruz (CICR) Roja pidió este jueves acceso inmediato para ayuda humanitaria en un asediado campo de refugiados palestino en la capital siria.
Las 18 mil personas que se cree permanecen en el campamento de Yarmuk necesitan “con urgencia” atención médica de emergencia, afirmó el CICR.
18 mil personas permanecen en Yarmuk
3 mil 500 niños hay en ese campo
47 personas han muerto en el sitio
160 mil civiles vivían antes de conflicto en el lugar
El lugar lleva sumido en los combates desde que milicianos del grupo Estado Islámico tomaran la semana pasada buena parte del amplio asentamiento. Las necesidades humanitarias “crecen cada día” , indicó el organismo. Los últimos combates son la última prueba para Yarmuk, donde los residentes ya han soportado dos años de asedio del gobierno, hambre y enfermedad. En un comunicado el jueves, el CICR pidió a las diversas facciones armadas que permitan el “paso inmediato y sin restricciones” de ayuda humanitaria y permitan que los civiles que quieran huir puedan hacerlo.