Los bombarderos B-1, escoltados por jets surcoreanos y estadounidenses, fueron vistos por un fotógrafo de The Associated Press cuando pasaban sobre la Base Aérea Osan, la cual está 120 kilómetros de la frontera con Corea del Norte.
Los bombarderos probablemente regresarán a su base en Guam, sin aterrizar en Corea del Sur.
Tales vuelos son comunes durante tiempos tensos.
Corea del Sur no tiene armas nucleares y depende de la “protección nuclear” de Estados Unidos como un disuasivo ante Corea del Norte.
Corea del Norte dice que la hostilidad de Estados Unidos es la razón por la que necesita un programa de armas nucleares.