La iniciativa será ahora puesta a consideración del gobernador Jerry Brown, que anunció su apoyo después de que el principal líder del Senado aceptó suavizarla y preservar la autoridad de los funcionarios de prisiones en cuanto a su cooperación con agentes de inmigración en muchos casos.
Los legisladores también aprobaron la canalización de recursos a asistencia jurídica y becas universitarias para personas que se encuentren sin permiso en Estados Unidos y dificultar que los negocios y agencias gubernamentales revelen la condición migratoria de las personas.
Los legisladores de California debaten la medida en momentos en que el Congreso federal considera ofrecer condición legal a los inmigrantes jóvenes cuyos padres los trajeron en forma ilegal al país o que se quedaron tras el vencimiento de sus visas.
La medida fue aprobada en la Legislatura solo con el apoyo de los demócratas frente a la objeción de los republicanos de que protegerá a delincuentes y dificultará a la Policía mantener la seguridad de la gente.
El presidente temporal del Senado, el demócrata Kevin de Leon, presentó la SB54 poco después de la elección de Trump para impedir la mayoría de interacciones entre los agentes federales de inmigración y las policías locales.
Debido a la fuerte discrepancia de la Policía y la intervención de Brown, la medida fue suavizada bastante.
La versión final prohíbe a los policías preguntar sobre la condición migratoria de las personas o participar en acciones de agentes de inmigración.
También les prohíbe hacer labores de agentes de inmigración o arrestar a personas debido a órdenes administrativas de inmigración.