Concretamente, el proyecto de ley da permiso a May para activar el Artículo 50 del Tratado europeo de Lisboa, puerta de salida de la Unión Europea.
El gobierno quería ahorrarse el permiso del Parlamento, pero fue obligado a solicitarlo por la Corte Suprema.
El proyecto de ley superó sin problemas, y sin ninguna enmienda, la Cámara de los Comunes (494 votos a favor contra 122) , pero la etapa de los Lores es un arma de doble filo: por un lado, los conservadores son minoría -252 de 800- y los lores no son electos, por lo que podrían endurecer las condiciones para que el gobierno saque al país de la UE, pero por otro, se arriesgarían a arreciar los llamados a suprimir la Cámara, por ignorar “la voluntad popular” expresada en el referéndum del 23 de junio.
En ese sentido apuntaban las declaraciones del diputado conservador Dominic Raab: “los Lores serían inteligentes si recuerdan el mandato democrático claro (de las urnas) y su propio futuro, cuando debatan” el proyecto de ley.
La suerte de los europeos en el Reino Unido, tema clave
Varios Lores han expresado su intención de enmendar la ley para garantizar los derechos de los europeos residentes en el Reino y para tener voto en el acuerdo final de divorcio con Bruselas.
Peter Mandelson, un Lord del Partido Laborista, antiguo comisario europeo, dijo que hay una “fuerte corriente de opinión” en la Cámara sobre la seriedad de ambos puntos, pero no consideró probable que los Lores bloqueen totalmente el Brexit.
“La Cámara de los Comunes debe prevalecer porque es la Cámara electa, pero espero que los Lores no tiren la toalla demasiado rápido” , dijo Mandelson a la BBC.
Precisamente, coincidiendo con el inicio del debate, los europeos residentes en el Reino Unido se manifestarán este lunes ante el Parlamento, convocados por la organización “Los 3 millones” , en referencia a su número.
May ha dicho hasta ahora que la suerte de los europeos en el Reino Unido dependerá de la de los británicos en la UE, de ahí el lema de la manifestación: “no somos moneda de cambio” .
Notificar el Brexit en marzo
La idea de May es que los Lores aprueben el proyecto de ley esta semana y notificar en marzo a sus socios europeos que el Reino Unido abandona la UE, a lo que seguirían dos años de negociaciones sobre los términos del divorcio.
La primera fecha con la que se había especulado era el 9 de marzo, durante la cumbre europea de Bruselas, pero el gobierno no está seguro de que la ley pase sin trabas por la Cámara Alta. De ser enmendada, tendría que volver a la Cámara Baja, la de los Comunes, para ser votada de nuevo.
Así, el ministro del Brexit, David Davis, dijo que la cumbre del 9 llega “demasiado pronto” para invocar el Artículo 50.
El gobierno se ha comprometido a dejar que el Parlamento vote sobre el acuerdo final con la Unión Europea, pero dejó claro que tal votación no serviría para frenar el Brexit, si no para decidir si se hace con un acuerdo o sin él.
Ángela Smith, Lord laborista, quiere que el gobierno incluya por escrito en el proyecto de ley ese y otros compromisos. “El gobierno hizo varias concesiones. Me gustaría ver esas concesiones, como la de organizar una votación significativa al final, y un cierto escrutinio parlamentario del proceso, en el texto de la ley” , dijo a la BBC.