El comercio de carbón entre los dos países sumó más de mil millones de dólares el pasado, según cifras del gobierno chino.
Sin embargo, tanto el intercambio de carbón, como el de hierro podrían continuar, si estos tienen un fin de subsistencia y no están destinados a financiar el programa nuclear y de misiles balísticos, señaló China, citando una clausula de la resolución.
El comercio con China es una fuente clave de divisas para el gobierno de Kim Jong-un. En el 2014, los intercambios con Pekín representaron cerca del 90% del comercio exterior de Pyongyang.
El ministerio de Comercio chino dijo en el anuncio que las empresas que comercian con Corea del Norte deberán firmar una declaración “solemne” de que los productos “no tienen ninguna relación con el programa nuclear ni el de misiles” .
En tanto, la venta de hidrocarburos destinados a la industria aeronáutica norcoreana quedará prohibida, pero se permitirá la exportación “con fines humanitarios” .
Pekín apoyó las sanciones de la ONU tras las nuevas exhibiciones de poderío militar de Pyongyang, pero también ha defendido que éstas no son “el fin último” y cree que deben estar acompañadas de diálogo para conseguir el desmantelamiento del presunto arsenal nuclear norcoreano.
El Gobierno chino, aliado histórico de Corea del Norte y su principales apoyos económicos, también ha criticado algunos gestos contra Pyongyang, como la imposición de sanciones adicionales a las de la ONU por parte de Corea del Sur y EE.UU.
Piden a Pyongyang “actitud constructiva”
Japón y China reclamaron el martes a Pyongyang que adopte “una actitud positiva y constructiva” para retomar las paralizadas conversaciones regionales para la desnuclearización de Corea del Norte, después de sus últimos test atómico y de misiles.
El enviado chino para la desnuclearización de la península coreana, Wu Dawei, mantuvo hoy una reunión en Tokio para tratar el tema con Kimihiro Ishikane, director general para Asia y Pacífico del Ministerio de Asuntos Exteriores nipón, en una las escasas visitas de altos cargos de Pekín a Japón desde finales del 2012.
“Corea del Norte debería mostrar en primer lugar una actitud positiva y constructiva hacia la desnuclearización” , señaló a los medios con motivo del encuentro el ministro nipón de Exteriores, Fumio Kishida, al ser preguntado sobre la posibilidad de que se reanuden las conversaciones con Pyongyang, estancadas desde 2008.
Wu, quien encabezó la pasada década el equipo negociador durante esas conversaciones a seis (China, las dos Coreas, Japón, Rusia y EEUU) , señaló por su parte que Pekín y Tokio “intercambiaron opiniones con franqueza” y comparten “una postura común” .
Ambos representantes quisieron mostrar un acercamiento entre los países vecinos, cuyas relaciones diplomáticas han estado prácticamente congeladas en los últimos años a causa de conflictos territoriales e históricos.
“Espero en que la reunión haya servido para estrechar nuestros lazos” , señaló en este sentido Kishida.
Asimismo, ambos países acordaron trabajar de forma coordinada para aplicar las nuevas sanciones adoptadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas contra Corea del Norte, a raíz sus últimas pruebas nuclear y de misiles.
Pekín apoyó las sanciones de las ONU tras las nuevas exhibiciones de poderío militar de Pyongyang, pero también ha defendido que éstas no son “el fin último” y deben acompañarse de diálogo con el régimen que lidera Kim Jong-un para abrir la vía al desmantelamiento su presunto arsenal nuclear.
El Gobierno chino, aliado histórico de Corea del Norte y uno de sus principales apoyos económicos, también ha criticado algunos gestos contra Pyongyang, como la imposición de sanciones adicionales a las de la ONU por parte de Corea del Sur y EEUU o la larga duración de las maniobras navales de las Armadas estadounidense y surcoreana.
Pese a las nuevas sanciones internacionales que aumentan la presión y las restricciones sobre el país asiático con vistas a frenar sus programas armamentísticos, Corea del Norte ha realizado recientemente varios lanzamientos de misiles.