La falla fue bautizada como “Plateros-Mixcoac” y ha sido objeto de especulación en círculos académicos, pues se había insinuado en el mapa de riesgos de la ciudad, pero nunca se había corroborado de manera concluyente.
El estudio, que llevó a cabo el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se basó en la investigación del origen de una serie de sismos ocurridos entre diciembre 2023 y enero 2024 en la capital mexicana.
Mediante la instalación de estaciones portátiles, los científicos pudieron realizar un análisis detallado de la actividad sísmica en el área oeste de la ciudad, revelando la presencia de esta importante falla.
Falla es relacionada a microsismos
Los investigadores recalcaron que el descubrimiento fue sorprendente, al encontrar una grieta de más de un kilómetro de longitud que atraviesa la zona de Mixcoac, una región densamente urbanizada que alberga áreas residenciales y comerciales de clase media, así como grandes avenidas.
El hallazgo de la grieta cobra especial relevancia tras el registro de 23 microsismos entre finales del año pasado y enero de 2024, principalmente en el lado occidental de la ciudad.
Estos temblores, con magnitudes de 1,1 a 3,2 grados y profundidades menores a 1,4 kilómetros, causaron daños significativos en ocho estructuras y una considerable cantidad de daños en la zona de Mixcoac, según información del gobierno capitalino verificada por los científicos.
Sin embargo, el informe advierte que aún queda mucho por investigar sobre las dimensiones y el potencial de la falla Plateros-Mixcoac, especialmente en lo que respecta a su impacto en las construcciones.
Los expertos de la UNAM señalan que las estimaciones previas no consideraron la existencia de esta falla, lo que podría tener implicaciones importantes en futuras acciones de diseño y prevención en la zona.
México, ubicado en una región de alta actividad tectónica, experimenta frecuentes movimientos sísmicos debido a su ubicación entre cinco placas tectónicas.
