Las 300 mujeres fueron localizadas en el bosque de Sambisa, un bastión del grupo islamista en el noreste de Nigeria.
Los padres de las niñas de Chibok expresaron de nuevo este miércoles su frustración después de que en un primer momento se anunciara que habían sido liberadas sus hijas.
“Nuestras esperanzas (están) hechas añicos” explicó Enoch Mark, que tiene a una hija y a una sobrina entre las 219 secuestradas.
“Cuando nos enteramos de esta liberación pensamos que eran nuestras hijas. Los padres empezaron a llamarse unos a otros y esperaban recibir confirmación que eran sus hijas“, explicó a la AFP, lamentando que el gobierno “haya mentido varias veces” sobre su liberación.
Pogo Bitrus, que tiene cuatro sobrinas entre las secuestradas, también desconfía del ejército. “Si el ejército tiene ahora capacidad [para liberar a las rehenes] ¿por qué no lo hizo antes?”, se pregunta.
Olukolade anunció el martes la liberación de 200 niñas y 93 mujeres y este miércoles aseguró a la AFP que “no es razonable declarar de prisa y corriendo” que entre ellas no hay algunas de Chibok, en contradicción con el portavoz del ejército de Tierra.
Desde principios de 2014, cerca de 2.000 mujeres y niñas han sido secuestradas por el grupo islamista, según Amnistía Internacional.
La operación militar en el bosque de Sambisa forma parte de una ofensiva regional nigeriana contra Boko Haram que empezó en febrero y en la que también participan Níger, Chad y Camerún.
La insurrección islamista y su represión por parte de las fuerzas de seguridad han dejado más de 15.000 muertos en Nigeria y 1,5 millones de personas han tenido que abandonar sus casas por el conflicto, según datos de la ONU.