Aunque aclaró inmediatamente “que es un producto que no tiene una validación científica en el tratamiento del coronavirus”.
Navajas explicó que por tal motivo que la administración del medicamento debe estar a cargo de un médico bajo el principio del “consentimiento informado”, lo que significa que “el paciente debe saber que está usando un producto que no está probado en esta enfermedad”.
La utilización debe estar “bajo protocolo clínico, médico, esto de ninguna manera significa la (autorización para la) automedicación”, agregó.
Médicos bolivianos, principalmente de las regiones de Santa Cruz (este) y Beni (noreste) revelaron en los últimos días que están usando ivermectina para tratar a personas que contrajeron el virus.
Tras las primeras informaciones sobre el medicamento, suministrado en pastillas, el producto comenzó a tener demanda en farmacias y en el mercado informal donde su precio por unidad se ha quintuplicado, de 10 a 50 bolivianos (de 1,4 a 7,0 dólares).
“Este remedio es de fácil aplicación y es muy barato, se puede aplicar en todo el territorio nacional, este medicamento elimina del cuerpo a ese organismo (coronavirus) en cinco días”, señaló el lunes el médico Erland Vaca Diez, aunque admitió que no lograron establecer su eficacia en el 100% de los casos de COVID-19.
El director Nacional de Epidemiología, Virgilio Prieto, señaló que la ivermectina “es un antiparasitario de uso preferente en veterinaria, pero que se ha utilizado también en cierto tipo de parasitosis humana”.
El presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, pidió prudencia: “Nosotros vamos a esperar los ensayos clínicos, vamos a esperar que realmente se puedan hacer los estudios como país y no estar jugando a la automedicación”, indicó.
Bolivia acumuló hasta la fecha dos mil 964 contagiados por coronavirus y 128 fallecidos. El país está en cuarentena desde el 17 de marzo y hasta fin de mayo.
