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Cuernos y colmillos: hombre se hace dolorosas operaciones e implantes para tener aspecto “diabólico”

Michel Faro do Prado, mejor conocido como "el satán humano", ha pasado los últimos 25 años de su vida sometiéndose a cirugías plásticas para cambiar su aspecto.

A pesar del sufrimiento físico que esta transformación representa, el tatuador brasileño continúa con este proceso. (Foto Prensa Libre: @diabaopraddo/Instagram)

A pesar del sufrimiento físico que esta transformación representa, el tatuador brasileño continúa con este proceso. (Foto Prensa Libre: @diabaopraddo/Instagram)

Desde sus 19 años, Michel Faro do Prado, tatuador brasileño, tenía una sola misión: volverse la representación del mismísimo diablo en la tierra.

“El satán humano”, como se le conoce popularmente a Michel Faro do Prado, ha pasado por varios procedimientos estéticos para lograr su aspecto actual. Entre sus operaciones más impresionantes están la implantación de cuernos sobre la cabeza, colmillos de plata y la amputación de dedos.

Asimismo, el tatuador brasileño de 44 años afirma que todas sus operaciones han sido de manera voluntaria, a pesar del doloroso proceso postoperatorio que esto representa.

En una entrevista con el New York Post, Michel Faro do Prado confesó sobre el dolor físico que ha sentido a raíz de sus polémicas cirugías estéticas.

 

“Tengo una buena tolerancia al dolor, pero el postoperatorio es el momento más difícil para mí. La verdad es que hay operaciones que, sin anestesia, serían imposibles de realizar. A veces me gustaría no sentir tanto dolor”, afirmó.

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(Foto Prensa Libre: @diabaopraddo/Instagram)

Los procedimientos quirúrgicos más impactantes e insólitos del tatuador brasileño incluyen la amputación de varios dedos de la mano y  la resección de la punta de su nariz y de sus orejas.

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Tras 25 años de operaciones, el llamado “satán humano” ha invertido una gran cantidad de dinero en estas cirugías. La más reciente de ellas, un implante de colmillos de plata, costó alrededor de mil dólares (Q7 mil 770 aproximadamente).

(Foto Prensa Libre: @diabaopraddo/Instagram)

A pesar de la polémica en torno a su aspecto, “el satán humano” ha contado en todo momento con el apoyo de su pareja, Carol, quien también es tatuadora.

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Los resultados de su transformación pueden ser vistos en su perfil de Instagram, espacio donde el tatuador comparte fotografías y videos sobre su polémico aspecto.

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