El buque, de 240 metros de eslora, partió el 29 de septiembre recién pasado del puerto de Jacksonville, en la costa este de Florida, con destino a San Juan de Puerto Rico, cuando el huracán Joaquín era todavía una fuerte tormenta tropical.
El carguero transportaba vehículos y otros bienes cuando un fallo mecánico dejó sin energía al barco, que no pudo desviarse de la ruta hacia la tormenta tropical, que se intensificó hasta alcanzar la categoría 4 en la escala de intensidad de Saffir-Simpson, de un máximo de 5.
La demanda alega que la compañía Tote Maritime y su capitán, Michales Davidson, actuaron con “negligencia” al ordenar navegar a un carguero de 41 años de antig edad en aguas tan peligrosas.
“El barco nunca debió dejar el muelle. No estaba en condiciones de navegar” , dijo en la audiencia Willie Gary, abogado de la familia demandante, según recogió el canal NBC News.
El letrado atribuyó a la “codicia” la razón de que los propietario del carguero permitieran que este navegara.
“Se podía haber esperado” , ya que el barco “no estaba en condiciones y (la compañía) debería haberlo sabido” , pero prevalecieron los intereses económicos, agregó Gary.
Las autoridades habían dado por hundido el barco el pasado cinco de octubre, tras encontrar un cuerpo, un bote salvavidas y varios chalecos de “El Faro” , en el que viajaban 28 estadounidenses y 5 polacos. EFE