El inspector general Joseph Ferguson, quien dirige la oficina de defensa del ciudadano en Chicago, había realizado una investigación interna sobre la conducta de los oficiales.
Informó que dos de los cuatro agentes habían sido despedidos y los otros dos suspendidos, pero no reveló sus identidades ni cuándo habían sido tomadas estas medidas disciplinarias.
“El Departamento de Aviación de Chicago (CDA) manejó de mala forma una situación que no representaba una amenaza y que terminó en la expulsión violenta de un pasajero”, afirmó Ferguson en un reporte público.
Los despedidos fueron el agente que inicialmente sacó a Dao de su asiento en el vuelo a Louisville, Kentucky, y el supervisor que estuvo involucrado en la “deliberada eliminación de hechos en un reporte sobre el hecho”, dijo el inspector general.
Otros dos agentes, uno que realizó “engañosas declaraciones en dos reportes” y otro que “realizó omisiones materiales en su reporte”, recibieron una suspensión de cinco días.
Repercusión
El escándalo provocó que las acciones de United Airlines, una de las mayores aerolíneas de Estados Unidos, cayeran un 4 por ciento en el arranque de la sesión en Wall Street, el pasado 11 de abril.
La polémica se intensificó con la reacción del consejero delegado de United Airlines, Oscar Muñoz, que solo pidió disculpas por haberse visto obligada a “reacomodar” a los pasajeros, sin hacer referencia a la violencia empleada contra el médico de 69 años.
El escándalo parece seguir a la empresa. En marzo, fue acusada de sexismo por prohibir a tres niñas usar leggings en un vuelo: una niña de 10 años tuvo que ponerse un vestido y las otras dos adolescentes fueron dejadas en la puerta de embarque.
El “'overbooking” es una práctica que consiste en la venta de más plazas de las disponibles, especialmente en hoteles y medios de transporte, con el objetivo de asegurar el lleno.
Vea el momento en que David Dao fue sacado a la fuerza: