“En momentos como estos creo que es importante recordar lo que los terroristas y extremistas violentos están tratando de hacer. Están tratando de hacer daño a personas inocentes, pero también quieren inspirar miedo en todos nosotros”, dijo Obama.
“Todos tenemos un papel que jugar como ciudadanos en asegurarnos de que no sucumbimos a ese miedo”, agregó a continuación.
Obama subrayó que ningún individuo ni organizaciones como el Estado Islámico (EI) “pueden en última instancia socavar” el modo de vida y los valores estadounidenses, y que ese es “el tipo de fuerza que va a ser absolutamente crucial no solo en los próximos días, sino también en los años por venir”.
“Mostrar a aquellos que quieren hacernos daño que nunca nos van a vencer (…) será el ingrediente más importante para derrotar a aquellos que lleven a cabo actos terroristas contra nosotros”, insistió.
Según Obama, hasta el momento las autoridades no han encontrado ninguna “conexión” entre lo ocurrido en Nueva York y Nueva Jersey y el ataque en un centro comercial de Minesota, perpetrado el sábado por un supuesto simpatizante yihadista y que causó nueve heridos.
El presidente recordó que el FBI está investigando el suceso de Minesota como un “posible acto de terrorismo”.
Aunque Obama no habló de posibles conexiones con el terrorismo internacional de los tres sucesos del fin de semana, sí enfatizó que EE.UU. continuará “liderando” la coalición global contra el EI, grupo que “está instigando a muchas personas a través de internet a cometer ataques”.
Detienen al hombre sospechoso de ataques
Al mismo tiempo que Obama hablaba, las autoridades estadounidense confirmaron la detención del hombre sospochoso que estaba siendo buscado por la Policía y el FBI por su posible vinculación con la explosión de varios artefactos en Nueva York y Nueva Jersey.
El naturalizado estadounidense nacido en Afganistán de 28 años en conexión con las explosiones de Nueva York y Nueva Jersey fue detenido el lunes luego de un tiroteo con la policía, según cadenas de TV.
Ahmad Khan Rahami fue detenido en Linden, Nueva Jersey, dijeron oficiales policiales a la cadena NBC.
La policía de Linden respondió en lo inmediato en relación a esta información.
A las explosiones en Chelsea, Manhattan, y Nueva Jersey, se sumó un ataque con arma blanca en Minnestota, en el que un estadounidense de origen somalí de 22 años apuñaló a nueve personas haciendo “referencias a Alá”.
Temores
La Policía federal había emitido una foto de Ahmad Khan Rahami, a cuya caza se lanzó para interrogarlo por la bomba que estalló en Nueva Jersey durante una carrera del Cuerpo de Marines, que no dejó heridos, y la del barrio de Chelsea, que dejó 29 lesionados.
El FBI indicó que el último domicilio conocido de Rahami es Elizabeth, ciudad de Nueva Jersey donde se halló un nido de explosivos en la estación de trenes de Elizabeth, cerca del aeropuerto de Newark.
Los ataques de Nueva York, Nueva Jersey y Minnesota tuvieron lugar en un lapso de 24 horas, planteando temores en materia de seguridad en momentos en que se libra una dura batalla electoral entre la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump.
Nueva York entró en alerta completa y desplegó más de 1.000 uniformados en aeropuertos, terminales de ómnibus y estaciones de subte, previo a la ciudad previo a la apertura el martes de la Asamblea General de la ONU.
Ataques vinculados
Las autoridades se inclinaban este lunes a pensar que los ataques de Nueva York y Nueva Jersey, así como el hallazgo de explosivos en la estación de tren de Elizabeth el domingo, están vinculados.
“Podrían tener un vínculo común o una persona detrás de todas las explosiones”, dijo el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo.
“No me sorprendería si hallamos una conexión internacional”, agregó Cuomo, quien el domingo había dicho que “no encontramos una vinculación con el ISIS, en referencia al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
“Sabemos mucho más de lo que sabíamos hace apenas 24 horas. Ciertamente cada vez nos inclinamos más en la dirección de que se trató de un ataque terrorista específico”, dijo por su parte De Blasio a la cadena ABC el alcalde de Nueva York, que desde este lunes acoge a jefes de Estado y de gobierno de todo el mundo para la Asamblea General de la ONU.
¿Lobo solitario?
Lo que no estaba del todo claro es el responsable de los ataques es un lobo solitario o un grupo.
“No sabemos aún se es un único individuo, más de un individuo o si se trata de un grupo organizado, dijo De Blasio a CNN.
Quince años después de los atentados del 11 de setiembre del 2001, las autoridades subrayan que Estados Unidos es mucho más seguro para enfrentar planes terroristas originados en el extranjero, aunque es vulnerable a ataques de “lobos solitarios” inspirados por la propaganda del EI o de Al Qaeda.
Las explosiones de Nueva York y Nueva Jersey no fueron reivindicadas, a diferencia del ataque a cuchilladas en Minnesota en un centro comercial de Saint Cloud, con saldo de nueve heridos, que se lo atribuyó el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
El autor del ataque era un “soldado del EI” que respondió a los llamados para tomar como objetivo a los ciudadanos de los países miembros de la coalición de los cruzados”, indicó Amaq, órgano de propaganda del grupo terrorista.
La Policía confirmó que el atacante preguntaba a las víctimas si eran musulmanas antes de apuñalarlas, y que “hacía referencias a Alá”.
El agresor, abatido por un policía fuera de servicio, era un estadounidense de origen somalí de 22 años.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo a CNN que el presidente Barack Obama, quien se encuentra en Nueva York para la Asamblea General de la ONU, es informado de los avances de la investigación.
La aspirante demócrata Hillary Clinton dijo que la amenaza terrorista era “real”, pero “nuestra determinación también”, en tanto instó a redoblar los esfuerzos de inteligencia para conjurarla.
Su rival republicano Donald Trump, en tanto, se refirió a la posibilidad de nuevos ataques y fustigó lo que calificó de “débiles” políticas de Estados Unidos, que abre las puertas a “decenas de miles” de inmigrantes.
“Tendremos que ser muy diuros”, advirtió a la cadena Fox.