“Acabamos de ser informados de que Canadá, un país con el que es muy difícil COMERCIAR, incluido el hecho de que ha cobrado a nuestros agricultores aranceles de hasta un 400 % durante años sobre los productos lácteos, acaba de anunciar que gravará los servicios digitales a nuestras empresas tecnológicas, lo que es un ataque directo y flagrante a nuestro país“, dijo en su plataforma, Truth Social.
Debido a ese gravamen, según añadió, Estados Unidos da por terminadas “TODAS” las discusiones comerciales con Canadá “con efecto inmediato”.
“En los próximos siete días comunicaremos a Canadá el arancel que pagará para hacer negocios con Estados Unidos“, afirmó Trump, que reprochó a ese país estar copiando a la Unión Europea la imposición de ese arancel sobre las tecnológicas.
El plazo oficial para llegar a nuevos pactos tras la aplicación por parte de Trump de los llamados “aranceles recíprocos” acababa este próximo 9 de julio, pero el líder republicano ya había dejado caer este viernes que podía extenderlo o acortarlo y que no se cerrarían pactos con todos.
El ministro de Finanzas canadiense, François-Philippe Champagne, advirtió la semana pasada que el impuesto digital sigue en vigor en Canadá y que el primer pago, que afecta entre otras a grandes multinacionales estadounidenses como Meta, se tiene que realizar el próximo lunes 30 de junio.
Donald Trump rompió con efecto inmediato la negociación comercial con Canadá tras reprocharle a ese país su intención de gravar los servicios digitales a las tecnológicas estadounidenses. https://t.co/FBPHastMOI
— EFE Noticias (@EFEnoticias) June 27, 2025
El impuesto, que se aplicará de forma retroactiva desde 2022, es un 3 % de los ingresos por encima de US$20 millones que las empresas obtienen de servicios digitales de residentes canadienses.
Donald J. Trump Truth Social 06.27.25 01:44 PM EST pic.twitter.com/kqmNyDXwgJ
— Commentary Donald J. Trump Posts From Truth Social (@TrumpDailyPosts) June 27, 2025
Champagne también indicó que la aplicación del impuesto digital formaba parte de las negociaciones comerciales que Washington y Ottawa estaban manteniendo tras la imposición de aranceles por parte de la Administración de Trump.



