“El centro podrá albergar a cerca de 700 detenidos, incluyendo una unidad separada para 36 transexuales”, dijo al digital Fusion Carl Rusnok, un portavoz del ICE.
La inauguración está prevista para noviembre y el centro estará operado por la empresa privada Emerald Correctional Management.
En la actualidad, el ICE tiene otro centro en Santa Ana (California) con una unidad para transexuales, pero está previsto su cierre ya que las autoridades locales han aprobado suspender el contrato con la agencia federal.
Según una investigación de Fusion, las mujeres transexuales son víctimas del 20 % de las agresiones sexuales cometidas en los centros para inmigrantes pese a que tan solo representan el 0,2 % de los detenidos.
Un informe reciente de la ONG Human Rights Watch sobre inmigrantes transexuales reportó que más de la mitad de las mujeres citadas en el reporte estuvieron encerradas en centros masculinos.
Hace un año, un grupo de 35 congresistas estadounidenses solicitó al Gobierno la liberación de todos los inmigrantes transexuales: “Estas personas son completamente vulnerables al abuso, incluido sexual, durante su detención”.
Organizaciones que defienden los derechos del colectivo han alertado que las transexuales también enfrentan la falta de medicamentos para sus terapias de reemplazo hormonal y la incomprensión de los guardias.