Gran parte de estos delitos fueron revelados en 2019 cuando Alex Cifuentes, uno de sus ex socios, decidió colaborar con la justicia estadounidense y relató varios detalles de la vida del fundador del Cártel de Sinaloa.
Según Cifuentes, “El Chapo” Guzmán solía tener encuentros “románticos” con menores de edad a quienes les pagaba por “sus servicios”.
Las adolescentes eran elegidas por una empleada del peligroso narcotraficante, identificada como comadre María, y ella era la encargada de enviarle fotografías para que él eligiera a su víctima.
“Alex Cifuentes, el jefe de Andrea Vélez, reveló que a una empleada del Chapo a quien llamaba comadre María, le enviaba regularmente fotografías de mujeres adolescentes y niñas de hasta 13 años, para que él eligiera con cuál quería tener relaciones sexuales, esto en el periodo que ya estaba casado con Emma”, se lee en el libro Emma y las otra señoras del narco de Anabel Hernández.
De igual forma, se reveló que “El Chapo” pagaba hasta US$5 mil por sus “encuentros románticos”, a quienes llevaba a uno de sus ranchos para “concretar el acuerdo”.
De Anabel Hernández, “EMMA y las otras señoras del Narco” #books pic.twitter.com/PVvTcgo81j
— Jorge Villa (@jorgevilla25) December 19, 2021
“Por aproximadamente US$5 mil, el acusado o uno de sus asociados quería tener la chica de su elección a uno de los ranchos del acusado para tener relaciones sexuales, varias eran menores de edad”, continúa relatando el libro.
En caso que alguna de las adolescentes opusiera resistencia, Joaquín Guzmán Loera las drogaba al colocar un polvo en sus bebidas.
“Cifuentes confesó que ‘El Chapo’ drogaba a las niñas para tener relaciones sexuales, colocando una sustancia en polvo en sus bebidas”.
Finalmente, el ex socio del narcotraficante mexicano aseguró que su gusto por las menores de edad se daba debido a que él las consideraba como “su vitamina” y eran el secreto para su “eterna juventud”, ya que lo hacían sentir más vivo que nunca.
“El esposo de Emma decía que las menores ‘eran como vitaminas para él’, porque creía que la actividad con las niñas le daba vida”, concluye esta publicación.