Todo ello para “proporcionar acceso a juicios justos y a procedimientos adecuados”, según recoge el texto publicado el viernes.
Los mandatarios de Alemania, Canadá, Estados Unidos Francia, Italia, Japón, Reino Unido y la Unión Europea pidieron al país sudamericano que “establezca las condiciones que permitan el diálogo entre el Gobierno y sus ciudadanos, con el fin de encontrar medios pacíficos para resolver la creciente y aguda crisis económica y política, respetando la voluntad del pueblo”.
El país se encuentra sumido en una profunda crisis política ante los constantes roces entre la Administración central y la Asamblea Nacional venezolana, de mayoría opositora.
En este sentido, el G7 pidió a ambas partes que “trabajen urgentemente juntos para lograr este objetivo (el fin de la crisis)”.