El detenido fue identificado como Daniel Alvarado, presunto pastor y líder de la filial del Tabernáculo Bautista de San Marcos, El Salvador, el cual habría cambiado las pandillas por la religión.
Alvarado, ex pandillero conocido como “El Dolphins”, escapó de El Salvador y llegó a Honduras de manera ilegal luego de ser acusado de agresión sexual contra una estudiante menor de edad el pasado 8 de marzo y desde entonces se convirtió en fugitivo de la justicia.
El supuesto pastor evangélico, quien cuenta con un oscuro pasado dentro de las pandillas, se encuentra siendo investigado por la Fiscalía General de la República de El Salvador luego de que el padre de la niña lo denunciara por haber abusado sexualmente de su hija.
Tras la denuncia, la Policía Nacional Civil de El Salvador llegó al colegio donde ocurrió el abuso sexual, pero el pastor y ex pandillero logró escapar y se dirigió hacia Honduras en busca de refugio.
Según las autoridades hondureñas, Alvarado ingresó a Copán de manera ilegal y tras el reporte de la policía fue capturado de manera inmediata.
El aumento de los operativos de vigilancia en las fronteras en Honduras y Guatemala se dieron luego de las fuertes medidas tomadas por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, en contra de los pandilleros, los cuales han escapado del país.
De acuerdo con Bukele, más de 6 mil pandilleros han sido detenidos en nueve días de vigencia de un régimen en contra de estos criminales luego de que El Salvador sufriera una ola de 87 homicidios en el lapso de tan solo dos días.