Antes de comprar la red social, Musk dijo que entre las personas a las que le daría la bienvenida Twitter está el expresidente Donald Trump, a quien la plataforma suspendió indefinidamente después de vincular los comentarios del político republicano con el asalto del 6 de enero de 2021 en el Capitolio.
No obstante, el director ejecutivo de Tesla también ha dicho en otras ocasiones que Twitter “no puede convertirse en un infierno de todos contra todos, donde se puede decir cualquier cosa sin consecuencias”.
Esta semana, dos grandes empresas publicitarias recomendaron a sus clientes que suspendieran temporalmente su publicidad en Twitter por a las preocupaciones sobre la capacidad de la empresa para monitorear su contenido, según The Wall Street Journal.
Los anuncios representan casi el 90% de los ingresos totales de Twitter.
Musk ha dicho que su estrategia de mercado para la plataforma es que la red social se vuelva menos dependiente de la publicidad y que se aumenten los ingresos por suscripción.