“Los tiburones están regresando. Su número está creciendo”, informó el Dr. Bob Hueter, científico jefe de OCEARCH, una organización sin fines de lucro de investigación y educación oceánica. “No están superpoblados, ni siquiera están probablemente cerca de lo que eran en las décadas de 1940 y 1950. Pero están regresando”, dijo.
Sin embargo, ante el regreso de los tiburnos, muchos se preguntan si esto conlleva algún peligro debido a la prsencia de estos en las playas.
Los avistamientos de tiburones han provocado cierres temporales en las playas de gran parte de Estados Unidos. En Nueva York, por ejemplo, la gobernadora Kathy Hochul desplegó docenas de drones para el monitoreo de tiburones en partes del estado después de que las autoridades de Long Island reportaron cinco ataques de tiburón no fatales durante dos días.
Los expertos aseguran que esto no es peligroso pero que llevará tiempo acostumbrarse
El riesgo de ser mordido por un tiburón es una posibilidad entre 1 en más de 3 millones. “Si los tiburones… quisieran morder a la gente, creo que probablemente tendríamos entre 10 y 20 000 mordeduras de tiburón al día”, dijo Gavin Naylor, director del Programa de Florida para la Investigación de Tiburones en la Universidad de Florida.
Y aunque hay más tiburones en el agua y más estadounidenses acuden en gran cantidad a las playas, el año pasado hubo una disminución en las mordeduras de tiburón. Por lo tanto, la tasa de mordeduras de tiburones no ha aumentado, explicó Naylor.
Para probar esa teoría, los investigadores de Shark Lab volaron drones sobre 26 playas del sur de California una vez al mes durante dos años y descubrieron que la mayoría de las veces, las personas y los tiburones nadaban pacíficamente a pocos metros de distancia.