Pero la historia de una niña liberada en esa localidad ha trascendido en medios internacionales.
Emily Hard cumplió 9 años el pasado viernes entre túneles mientras estaba cautiva por Hamás, y sus padres la daban por muerta.
El viernes último, medios internacionales mostraban a su padre, Thomas Hand, entre lágrimas en una reunión en honor de la niña en Londres. Había sido secuestrada aún en ropa de dormir junto con otros rehenes.
Sin embargo, la pesadilla de la familia terminó el sábado, pues la menor formaba parte del segundo grupo de cautivos liberados por el grupo islamista.
Emily, la niña irlandesa-israelí, había sido secuestrada durante la incursión del grupo islamista en localidades fronterizas israelíes el pasado 7 de octubre, donde fueron asesinados más de un centenar de pobladores, entre ellas la madrastra de la menor.
“Con Emily ya en casa, su padre Thomas Hand dijo que la familia no podía ‘encontrar las palabras para describir nuestras emociones después de 50 días desafiantes y complicados'”, consigna el diario peruano El Comercio.
Citando a varias fuentes, el diario explica que, al parecer, un error de identidad le hizo creer a la familia que la niña estaba muerta, pero los test de ADN de la víctima que se creía que era Emily no correspondían, lo que le dio un rayo de esperanza a la familia.
La incertidumbre creció aún más cuando los parientes encontraron a un testigo que vio cómo Hamás se llevaba a Emily en una furgoneta.
“Existe una gran posibilidad de que esté en Gaza, ahora es esperanza, sólo podemos esperar que podamos recuperarla con vida”, había dicho el padre de la niña antes de confirmar que estaba viva.
“Tras la liberación de Emily, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) divulgaron imágenes de los rehenes reuniéndose con sus familiares. Entre ellas se pudo observar a Emily abrazando a Tom”, consigna El Comercio.
“Estamos felices de abrazar a Emily nuevamente, pero al mismo tiempo recordamos a todos los rehenes que aún no han regresado”, dijo la familia, citada por el diario.