La Casa Blanca tiene previsto anunciar esta semana un nuevo decreto migratorio, tras el bloqueo del anterior, pero todavía no se conoce la fecha exacta.
El exmandatario republicano (2001-2009) defendió que, para vencer al grupo terrorista Estado Islámico (EI) , EE.UU. debe “proyectar fortaleza”, pero prefirió no opinar sobre si la política migratoria puede influir o no en la derrota de los terroristas.
En su primera entrevista tras la investidura de Trump el pasado 20 de enero, Bush destacó que “es muy importante” que todos los estadounidenses reconozcan “que una de las grandes fortalezas” del país es que las personas pueden profesar la fe que desean o no profesar ninguna.
“Yo entendí desde el principio que este es un conflicto ideológico y que las personas que asesinan a inocentes no son personas religiosas. Quieren promover una ideología y hemos enfrentado este tipo de ideologías en el pasado” , indicó.
En la entrevista, Bush evitó la crítica dura contra Trump, a pesar de haberse desmarcado de él en la campaña, no haber asistido a la Convención del partido y anunciar, a través de un portavoz, que no votó por él, ni tampoco por la demócrata Hillary Clinton, en las elecciones.
Critica ataques contra la prensa
Bush criticó indirectamente las declaraciones contra la prensa del actual mandatario Donald Trump, al opinar públicamente sobre medios y política este lunes.
El 43 presidente –quien mantuvo sus propios conflictos con la prensa mientras vivió en la Casa Blanca de 2001 a 2009 — rechazó las acusaciones de Trump contra varios medios de comunicación en las que los calificó de “enemigos del pueblo” .
“Considero que los medios de comunicación son indispensables para la democracia, que necesitamos a los medios para que gente como yo tenga que rendir cuentas” por lo que hace, dijo Bush al programa “Today” de la cadena de televisión NBC.
“El poder puede ser muy adictivo y corrosivo, y es muy importante que los medios puedan rendir cuentas a quienes abusen del poder” , dijo Bush.
El expresidente también estimó que las críticas sistemáticas contra los medios estadounidenses minan los esfuerzos del país por promover la democracia y una prensa libre en el extranjero.
Desde que asumió el poder en enero, Trump mantiene una feroz batalla con los medios, a los que llegó a calificar de “deshonestos” y “mentirosos” . También ha acusado a grandes canales de televisión y periódicos, como CNN y The New York Times, de ser “enemigos del pueblo estadounidense” .