“El Señor acaba de llamar a su Reino a mi padre Gral Div SP Gary Augusto Prado Salmón. Se fue acompañado de su esposa e hijos. Nos deja un legado de amor, honradez y temple. Fue una persona extraordinaria”, comunicó su hijo Gary Prado Araúz en las redes sociales.
Asimismo, agradeció a todas las personas que apoyaron a su familia “en este tiempo de su agonía” y finalizó su mensaje con un “Dios los bendiga”.
En declaraciones a EFE, Prado Araúz señaló que hace meses su padre tuvo “una infección recurrente, por su condición de discapacidad, (que) se complicó con neumonías y después con (una) falla renal“, pero destacó que “luchó hasta el final”.
La figura del general Gary Prado Salmón trascendió cuando el 8 de octubre 1967 comandó una patrulla que atravesó la quebrada el Churro al suroeste de Bolivia y que capturó a Guevara que estaba herido, para posteriormente entregarlo a sus superiores.
Un día después, el Ejército boliviano cumplió la instrucción de ejecutar al Che.
En 1981 la vida del militar quedó marcada nuevamente cuando un disparo accidental de uno de sus camaradas impactó en su columna, lo que ocasionó que desde entonces utilice una silla de ruedas para movilizarse.
“Para él la captura del Che no fue lo más importante que hizo en su vida. Para él lo más importante fue contribuir a que las Fuerzas Armadas sean una institución democrática, respetuosa de la Constitución y las leyes”, indicó su hijo.
El general Prado fue docente universitario, embajador y asesor del expresidente boliviano Jaime Paz Zamora (1989-1993), entre otras funciones que desempeñó.
Prado Araúz destacó que su padre “conoció la cárcel, el exilio (y) la clandestinidad luchando por sus principios democráticos”, incluso afrontó el que considera fue un “juicio vergonzoso” cuando tuvo que cumplir 11 años de prisión domiciliaria por una acusación por terrorismo durante el Gobierno de Evo Morales (2006-2019).
Aquel se llamó el caso “terrorismo” que estalló el 16 de abril de 2009, cuando un comando policial realizó una operación en un hotel de Santa Cruz que se saldó con tres extranjeros muertos y dos detenidos, acusados de formar parte de una célula terrorista que supuestamente pretendía la secesión de la región cruceña y atentar contra Morales.
Prado Araúz contó a EFE que su padre “dejó un libro de memorias inconcluso” al que le falta “el último capítulo” que debía precisamente relatar el que consideró fue un “juicio injusto” que se cerró en 2020 con la absolución de 12 acusados.
En el último tiempo el militar retirado se dedicó principalmente escribir y transmitir sus ideas en obras como “La Guerrilla Inmolada“, en donde sostiene la tesis de que el Partido Comunista de Cuba “mandó a morir” al Che Guevara a Bolivia porque ya no lo toleraba.
Gary Prado Salmón “fue un general de un temple extraordinario, nada le doblegaba, nadie le torcía”, finalizó su hijo.