El vídeo del fiscal proporciona más detalles sobre lo ocurrido en la madrugada del 31 de octubre dentro de la unidad, a partir del testimonio del conductor -“la única declaración con la que contamos hasta este momento”- y de los indicios y pruebas periciales llevadas a cabo.
Gómez relata que tres de los supuestos asaltantes se encontraban “de la mitad hacia la parte de adelante” del autobús cuando el pasajero armado se levantó y les disparó, causándoles heridas en el costado izquierdo.
En los compartimentos superiores del autobús, donde se depositan las mochilas, se encontraron cuatro casquillos de 9 mm; dos en la parte de atrás de la unidad y otras dos en la mitad.
Tras los primeros disparos, los asaltantes corrieron hacia la parte delantera del autobús, donde se encontraba su cuarto compañero, quien había estado amenazando con una navaja al conductor durante el trayecto.
“Creemos nosotros que fue la persona que recibió solamente un disparo de arma de fuego”, dado que el cuerpo presenta un orificio “de entrada en la escápula izquierda sin salida”, que rompió una “arteria principal”, causando su muerte, indica el fiscal.
Los otros tres asaltantes descendieron de la unidad y trataron de correr, pero fueron baleados por el pasajero, con lo que sus cuerpos quedaron a pocos metros del primer cadáver, que rodó desde la cabina del conductor hasta el pavimento cuando se abrió la puerta del autobús.
El pasajero “toma la mochila donde (los asaltantes) habían introducido las pertenencias de los pasajeros y esta persona regresa al autobús”, narra Gómez.
Según la versión de la PGJEM, el pasajero que efectuó los disparos bajó del autobús metros después del lugar de los hechos.
El operador de la unidad dijo a las autoridades que no pudo reconocer los rasgos de esta persona porque, en primer lugar, “estaba concentrado en manejar el autobús”.
Además, dado que los sucesos ocurrieron en la madrugada (alrededor de las 6.00 hora local, 12.00 GMT), “las luces en ese momento no se encontraban prendidas”.
Gómez matizó que, aunque los casquillos fueron encontrados en los compartimentos superiores de la unidad, “pudieron haberse movido”, porque el autobús continuó su viaje hasta su destino, la Ciudad de México, tras el incidente.
A esto se le añade que “una vez el autobús llega al encierro correspondiente, la compañía de inmediato lleva a cabo las labores propias de limpieza”, añadió el fiscal.
En los asientos traseros las autoridades encontraron una mochila negra con dos carteras, un celular y artículos personales.