“Hasta el momento, se desconocen la identidad de los muertos, así como el móvil del crimen, aunque por las características se presume que una organización criminal podría estar detrás del hecho”, precisó la funcionaria.
Tendencia
Los narcotraficantes mexicanos suelen asesinar a sus enemigos o víctimas para luego exponer en vías públicas sus cuerpos, a veces cercenados.
Los macabros hallazgos de cadáveres colgados de puentes llegaron a ser casi cotidianos en años pasados, aunque últimamente se volvieron mucho menos frecuentes.
Este mismo viernes en la región de Zamora, también en Michoacán, se registró un enfrentamiento entre fuerzas de seguridad y presuntos delincuentes en el que murieron dos de los pistoleros y un uniformado, informó una fuente de la fiscalía estatal.
Estos hechos ocurren un día después de la renuncia del secretario de Seguridad Pública de Michoacán, Javier Ocampo.
Violencia
Michoacán estuvo asolado durante años por Los Caballeros Templarios, un sanguinario cártel narcotraficante que tejió vínculos con las autoridades locales y que actualmente se encuentra desmantelado con la captura o abatimiento de sus principales líderes.
La violencia derivada del narcotráfico alcanza también al estado de Veracruz, cuyas rutas de trasiego de drogas a Estados Unidos son disputadas por los cárteles Los Zetas, Nueva Generación y del Golfo.
En ese estado, cinco presuntos delincuentes “fueron abatidos” el jueves por policías municipales de Orizaba, en un enfrentamiento cuyo fuego cruzado alcanzó a herir a un menor de edad, informaron autoridades locales este viernes.