La imagen cobró relevancia en Twitter en donde se viralizó la frase “Sorry for Brussels” y ha sido compartida miles de veces.
El momento fue capturado por varios fotógrafos que se encontraban en el lugar de una protesta de los refugiados en donde también se observó a varios niños con leyendas pintadas en su cuerpo para condenar los atentados.
El número de refugiados en Grecia es actualmente de 52 mil 200 personas.
Una cuarta parte de ellos están bloqueados en Idomeni, localidad del norte de Grecia fronteriza con Macedonia.
La frontera entre ambos países está cerrada desde hace varios días. (Foto Prensa Libre: EFE).
Miles de usuarios de Twitter han utilizado la imagen para condenar la criminalización de los refugiados quienes huyen de la misma violencia que el martes golpeó a Bruselas.
La vida en Idomeni
La vida en Idomeni es una cola continúa, para el reparto de comida, para la clínica médica, para la asistencia legal. Voluntarios de toda Europa han llegado hasta Grecia para hacer posible la vida en esta tierra de nadie.
En Idomeni hay a la fecha, según fuentes oficiales, 13 mil 250 personas.
La presencia gubernamental es mínima, prácticamente se reduce a unos cuantos policías que organizan el tráfico, se aseguran de que nadie cruce al lado macedonio de las vías del tren y reparten folletos pidiendo a los refugiados que se resignen y se acojan al sistema de reubicación.
La mayoría del trabajo lo realizan organizaciones no gubernamentales y voluntarios independientes. Son también ellos los que tienen que responder a las dudas de los refugiados, aunque no tengan las respuestas.
El trabajo más llamativo es el que lleva a cabo Médicos Sin Fronteras, que con excavadoras y voluntarios está levantando enormes carpas, con suelo de PVC y literas.
Tienen capacidad para unas 200 personas cada una, que son elegidas por los miembros de la oenegé de entre los más vulnerables del campo: mujeres embarazadas, personas enfermas, ancianos y niños.