Todo ocurrió en el Hospital Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Madero, Tamaulipas, donde un cuerpo que no era fue cremado.
El diario Milenio reveló este jueves 17 de junio que Evaristo Sánchez Cázares, de 83 años, fue incinerado por error. Padecía de cáncer en el hígado.
La hija del fallecido, Angélica Sánchez, contó que llegó al hospital tarde en la noche para recoger el cuerpo de su padre, quien falleció de un infarto, pero en un principio el personal le dijo que no lo encontraban.
El cadáver ya había sido cremado sin la autorización de un familiar, por lo que ahora quieren entregar las cenizas, pero los parientes se rehúsan no solo por considerar que hubo negligencia, sino también porque no saben si en realidad se trate de Evaristo.
“El subdirector -del hospital regional- habló con nosotros y aceptó el error y nos dijo ‘somos humanos y nos equivocamos’”, agregó la hija.
Al parecer, el adulto mayor fue confundido con otra persona que falleció por coronavirus.
“Mi papá tenía mucho dolor en el estómago, pero era por su cáncer de hígado. Hoy precisamente nos lo iban a dar de alta pero sufrió un paro respiratorio, no fue covid”, agregó Angélica.
Además, señaló que personal de dicho centro asistencial del IMSS les está ofreciendo dinero para que “ya no se diga nada” y acepten las cenizas.
Sin embargo, los familiares exigen al hospital una indemnización y prueba de ADN para corroborar que el cuerpo cremado pertenece a Evaristo. También presentaron una denuncia en la Fiscalía, según publicó Milenio.
Otra hija, Yazmín Sánchez, explicó: “Una indemnización, obviamente por el cuerpo de mi papá. Vamos a entrar con el director para ver qué solución nos da, y exigimos la prueba de ADN porque supuestamente el cuerpo que tienen cremado es el de mi papá, pero nadie nos garantiza que sea el cuerpo de él, porque si fuera así, estaríamos velándolo”.
Con información de Milenio
