Entre ellos, se encuentra Valentín Cárdenas, exdirector del Centro Federal de Readaptación Social Número Uno, conocido como Altiplano y ubicado en el central Estado de México.
A todos se les acusa por su probable responsabilidad en el delito de evasión de presos “en la hipótesis de cuando el detenido está siendo procesado” por narcotráfico.
El pasado 30 de mayo, la juez del Quinto Tribunal Unitario del Segundo Circuito ordenó la reposición del procedimiento en esta causa penal a once procesados.
Ello al considerar que al rendir su primera declaración preparatoria no se precisó el nombre de sus acusadores, los hechos materia de la acusación y las conductas que en concreto se atribuyen a los inculpados.
“En el caso de siete inculpados, por tener intereses en contrario, no podían ser representados por el mismo defensor particular; pues con ello se violaba su garantía de defensa adecuada; por lo que cada procesado debía tener un defensor propio” , explicó el escrito.
Y, por último, por considerar que el tribunal de apelación estableció que quedaban firmes las restantes actuaciones en el juicio.
“Incluyendo las pruebas recabadas con posterioridad a las resoluciones de término constitucional y que la revocación no implicaba dejar en libertad a los 11 procesados” , especificó.
Así, este junio se dictaron los nuevas autos de formal prisión (orden de juicio) contra los once inculpados en el delito de evasión de presos.
El 11 de julio del 2015, Guzmán se fugó de la cárcel del Altiplano, en el central Estado de México, a través de un túnel de un kilómetro y medio que iba desde la misma celda del reo hasta una casa en construcción afuera del presidio.
Esta fue la segunda vez que el líder del cártel de Sinaloa se fugó de un penal de máxima seguridad en México después de que en enero de 2001 se escapara de la cárcel de Puente Grande, en el occidental estado de Jalisco.
En enero de este año fue recapturado cerca de Los Mochis, en su natal estado de Sinaloa (noroeste) .