“Creemos que siendo un país en el que hay 52 millones de personas que hablan el castellano o el español, no es una buena idea renunciar a un instrumento de comunicación”, añadió.
El ministro de Educación y Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, quien es portavoz del gobierno, lamentó la noticia “ya que el conocimiento y uso de diferentes idiomas en una sociedad es algo que sirve para vertebrar a un país”.
“Esta decisión no detendrá ni pondrá en riesgo la difusión imparable de nuestro idioma en Estados Unidos y en el mundo entero”, aseguró Mendez de Vigo.
La versión en español de la web gubernamental estadounidense dejó de estar activa este fin de semana luego de la investidura de Trump.
Poco después de estas declaraciones, la Casa Blanca anunció que estaba trabajando en reconstruir el sitio web oficial de la presidencia, incluyendo su página en español.
Trump retira el español de la web de la Casa Blanca: un desprecio a la comunidad hispana y un ataque intolerable a la segunda lengua en EEUU
— Susana Díaz Pacheco (@susanadiaz) January 22, 2017
“Continuamos trabajando para la reconstrucción del sitio web en varias áreas y en esa área (en español).
La gente de tecnología está trabajando día y noche para tener todo listo lo antes posible”, aseguró el lunes en conferencia de prensa el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer.
En las presidenciales del 8 de noviembre, un 29% de los hispanos votaron por Trump, mientras un 65% lo hizo por su rival demócrata, Hillary Clinton.
EE. UU., segundo país hispanohablante-
Según datos de la Oficina del Censo estadounidense del 2015, la población hispana asciende a los 56.6 millones (17.6% del total) y 40 millones de residentes en Estados Unidos hablan español en sus casas, lo que supone un aumento del 131% respecto a 1990.
De hecho, el Instituto Cervantes señala en su informe del 2015 que Estados Unidos ya es el segundo país después de México con más hispanohablantes, 52.9 millones (41.3 nativos y 11.6 con competencias limitadas).
La promoción y enseñanza en el extranjero del español es una de las prioridades culturales de Madrid que creó para tal fin el Instituto Cervantes en 1991.
El Instituto cuenta con cinco sedes en Estados Unidos (Nueva York, Albuquerque, Chicago, Boston y Seattle) y tiene prevista la apertura de nuevas delegaciones en Washington y Miami en una apuesta por reforzar su presencia en este país que, según sus cálculos, será el primer país hispanohablante en el 2050.
Por ello, la supresión de la web en español de la Casa Blanca causó gran revuelo en España, abriendo el lunes la versión digital del diario generalista más leído, El País.
El director de la Real Academia Española, Darío Villanueva, calificó este hecho como “una regresión muy importante”.
La oposición socialista incluso reclamó una reacción diplomática conjunta con el resto de países hispanohablantes contra esta acción del gobierno de Trump.
Se trata de “un desprecio a la comunidad hispana y un ataque intolerable a la segunda lengua en EE. UU.”, reaccionó la dirigente socialista andaluza Susana Díaz en su cuenta de Twitter.
Adiós idioma español
La versión en español de la página web de la Casa Blanca ha desaparecido de internet poco después de que el nuevo presidente de EE. UU., Donald Trump, tomara posesión de su cargo.
“Sorry, the page youre looking for cant be found (Disculpe, la página que está buscando no puede encontrarse)”, es el mensaje que se encuentran ahora los internautas que intentan acceder a la página www.whitehouse.gov/espanol.
La versión en español de esa página web se abrió por primera vez en los meses posteriores a la llegada al poder del expresidente Barack Obama y hasta días antes del traspaso de mando tenía un blog dedicados a temas de interés de la comunidad hispana.
La nueva Administración Trump, en la que no hay ningún latino en los puestos de responsabilidad del gabinete, ha ordenado también la clausura de otros instrumentos de comunicación en español como la cuenta @LaCasaBlanca que tenía en Twitter o su página de Facebook.
Además, con la llegada del nuevo presidente a la Casa Blanca todavía no se ha nombrado a un nuevo responsable de prensa para medios hispanos, un cargo que ocupaba hasta la fecha Gabriela Chojkier.
Días antes de su investidura el pasado viernes, Trump terminó de anunciar los nombres de todos los integrantes de su gabinete, la mayoría de los cuales aún deben ser confirmados por el Senado y entre los que no hay ningún latino.
Ya durante la campaña electoral, el magnate neoyorquino protagonizó varios momentos polémicos por sus críticas al uso del español en Estados Unidos, en un país donde más de 55 millones de personas hablan ese idioma.
En septiembre del 2015, Trump aprovechó un acto celebrado en Miami para criticar al exgobernador de Florida Jeb Bush asegurando que le gustaba el político republicano pero que debería “dar ejemplo y hablar en inglés mientras está en Estados Unidos”.