El sistema permite que el votante introduzca su tarjeta de identidad, y en lugar de un código de 4 letras o números, inserta su huella dactilar, de forma que la máquina puede identificar a cada tarjeta con su usuario.
A continuación, aparecen en la pantalla los logos con los diferentes partidos, y el votante no tiene más que hacer “clic” encima de la formación elegida, que en Marruecos se representan con dibujos, lo que representa una facilidad añadida para los numerosos votantes analfabetos (más de un tercio del censo lo son) .
Resultados en tiempo real
Para las autoridades y los partidos políticos, esta invención también tiene la gran ventaja de dar los resultados de las elecciones en tiempo real, sin tener que esperar hasta la medio de la noche o al día siguiente para saber el resultado final de una elección.
Las autoridades marroquíes no se han manifestado sobre la idea de Karama, y parece poco probable que la acepten, dado el férreo control que el ministerio del Interior conserva sobre todo el proceso electoral y la estrategia de entrega escalonada de datos.