Según un responsable local, Tengani (su único nombre), unos vecinos empezaron a sospechar viendo los gestos de una de las siete personas que llevaba una bolsa con huesos.
“Persiguieron al hombre y lo detuvieron”, explicó Tengani a la AFP. “Al parecer él confirmó que en la bolsa había huesos humanos y en ese momento la muchedumbre comenzó a juntarse y a quemar uno por uno” a los siete sospechosos.
La policía no ha realizado ninguna detención.
Las autoridades investigaban el miércoles si los huesos pertenecían a albinos.
En varios países de África subsahariana, los miembros y huesos de albinos se utilizan para rituales creyendo que aportan riqueza y poder.
El albinismo, una enfermedad genética hereditaria que se traduce por una ausencia de pigmentación de la piel, afecta a una de cada 1.200 personas en Malaui.