Según la fuente, un atacante suicida detonó los explosivos que portaba en un vehículo cerca del consulado indio y a continuación cuatro insurgentes más intentaron entrar en las instalaciones, pero fueron abatidos por las fuerzas de seguridad.
Khogyanai aseguró que la acción insurgente ha concluido y que la situación ha vuelto a la normalidad después de que las tropas afganas rastrearan la zona.
“Ningún empleado del consulado figura entre los muertos o heridos”, anotó el portavoz.
Este es el segundo ataque en la zona en el lapso de un mes y medio.
El pasado 13 de enero, al menos siete miembros de las fuerzas afganas y tres asaltantes suicidas murieron y diez resultaron heridas en un ataque contra una casa de huéspedes y el consulado de Pakistán en Jalalabad.
El ataque fue reivindicado entonces por el grupo terrorista Estado Islámico en Afganistán, que tiene su principal bastión en esa provincia afgana.
Esa acción insurgente se produjo una semana después del ataque al consulado de la India en la ciudad afgana de Mazar-i-Sharif, en el norte de Afganistán, en el que murieron cinco personas (los cuatro atacantes y un policía) tras 25 horas de enfrentamiento.