“Si no se realizan elecciones generales bajo las condiciones estipuladas, pasaría a ser el momento necesario para aplicar la suspensión a Venezuela de las actividades de la Organización en función del Artículo 21 de la Carta Democrática Interamericana”, dijo Almagro en una carta al Consejo Permanente del organismo.
En el documento de 75 páginas, el excanciller uruguayo reiteró que las gestiones diplomáticas “no han dado por resultado ningún progreso” y los intentos de diálogo “han fracasado”, mientras los venezolanos “han perdido aún más fe en su gobierno y en el proceso democrático”.
La carta, una versión actualizada de su crítico informe sobre Venezuela, es la más reciente de una serie de misivas de Almagro, y refleja su impaciencia ante el deterioro institucional y la agudización de la situación económica en Venezuela.
“La señal inequívoca de retomar el rumbo institucional por parte del país es que se realice en los próximos 30 días un llamado a elecciones generales, la liberación de los presos políticos, la validación de las leyes que han sido anuladas”, señaló el diplomático, haciendo un llamado a la renovación del Poder Electoral y los magistrados de la Corte Suprema.
Almagro condenó una “inacción” de la región y pidió al Consejo Permanente, que reúne a los 34 países miembro, “resultados concretos” para “restaurar la democracia” en Venezuela.
“Esperar soluciones de un proceso de diálogo que no es tal (…) nos hace cómplices desde la comodidad de esperar por la acción de otros. Genera responsabilidad por omisión”, señaló.
La primera versión del informe, que Almagro presentó en junio pasado a los países miembros, provocó un debate inconcluso en el organismo sobre la aplicación de la Carta Democrática Interamericana, que faculta a la OEA a intervenir en casos de alteración constitucional.
En su actualización, el jefe del organismo denunció que ninguna de las recomendaciones enumeradas en el informe se cumplieron.
Parlamento declara crisis humanitaria de alimentos
La Asamblea Nacional de Venezuela (AN, Parlamento), de mayoría opositora, aprobó este martes declarar la “crisis humanitaria en materia alimentaria” en el país, un acuerdo enmarcado en “una crisis social sin precedentes” que, aseguran los diputados, tiene a tres millones de venezolanos “comiendo desperdicios”.
La llamada “Declaratoria de crisis humanitaria en materia alimentaria en Venezuela”, que fue aprobada de manera unánime por la oposición parlamentaria y con el voto ausente del bando oficialista, será enviada a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a las Naciones Unidas, entre otros organismos internacionales.
En la declaración se considera que “el modelo económico impuesto por el Ejecutivo nacional basado en estatismo, expropiaciones arbitrarias, controles abusivos de precios y en desprecio de la iniciativa privada en la economía solo ha tenido como resultado el colapso a niveles históricos en la producción nacional” .
También se considera que las consecuencias en la población de “las malas políticas económicas y el estado crítico de la producción nacional que ellas han ocasionado han llevado a una crisis social sin precedentes que se expresa en 82 % de hogares pobres, 73 % de personas perdiendo peso” .
Se indica en el acuerdo que gracias a estas políticas hay 52 % de niños que corren el riesgo de padecer o padecen de desnutrición “y 3 millones de venezolanos comiendo desperdicios” .
Se señala, además, que la industria agrícola sufre la escasez de materias primas lo que también dificulta la atención de las necesidades alimentarias de la población.
En el acuerdo se critican los estatales Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) que fueron creados hace casi un año por el Gobierno de Nicolás Maduro para vender y distribuir alimentos básicos y que, según se indica en el documento, han atendido a “solo el 10 % de la población” .
Los CL AP , dice la declaratoria, “no atacan las causas de la crisis alimentaria al ser un mecanismo basado netamente en las importaciones de productos que además propicia la corrupción” .
Como parte del acuerdo se decidió crear una comisión especial que analizará las acciones que deben emprenderse “para impedir que la crisis humanitaria siga causando perjuicios irreversibles a los venezolanos” .
Esta comisión también identificará las “fuentes de cooperación internacional para combatir el hambre en Venezuela” que incorporen a organizaciones religiosas, delegaciones diplomáticas y organismos internacionales.
Se acuerda exigir al jefe de Estado, Nicolás Maduro, “la inmediata sustitución” del ministro de Alimentación, Rodolfo Marco y la comparecencia ante la AN del coordinador nacional de los CL AP , Freddy Bernal y del ministro de Agricultura Productiva, Wilmer Castro Solteldo.