A Marcos, el enigmático líder de este movimiento guerrillero de defensa de los derechos indígenas, se le atribuían desde 1995 los delitos de sedición, motín, rebelión, terrorismo y conspiración, además de portación y transmisión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército.
Con el aura misteriosa que le dio su pasamontañas, gorra y su inseparable pipa, el subcomandante ha sido el estandarte del zapatismo desde que el EZLN se levantó en armas el 1 de enero de 1994 para defender los derechos sociales en Chiapas, una de las regiones mexicanas con mayores índices de población indígena, pobreza y analfabetismo.
Comunidades de zapatistas de gestión autónoma siguen existiendo en las montañas de Chiapas, donde en mayo del 2015 se vio por última vez públicamente a Marcos.
- En video/archivo (25/05/2014) vea: “Subcomandante Marcos abandona la dirigencia”.
https://www.youtube.com/watch?v=nrHp1H6RSgI
El líder zapatista ahora se hace llamar subcomandante Galeano en honor al maestro José Luis Solís López Galeano, quien murió en el 2014 asesinado por un grupo de supuestos antizapatistas.