Destacó que “hubo un momento en que, en principio, acordamos con Corea del Norte que asumiría ciertos compromisos: suspender su programa nuclear militar”.
“No había que haber bloqueado, literalmente sólo una semana después, las cuentas bancarias norcoreanas. ¿Para qué había que provocarlos? Ellos se salieron definitivamente de todos los acuerdos y comenzaron a desarrollar sus programas nucleares y de misiles”, dijo.
En consecuencia, agregó, “ahora tenemos lo que tenemos: una bomba de hidrógeno, en vez de una atómica”, y “en vez de simplísimas piezas de artillería, ahora tienen misiles de 2 mil 700 kilómetros de alcance y de hasta 5 mil kilómetros”.
“¿Acaso esa es la vía capaz de solucionar el problema? No. Nosotros vemos que ocurre todo lo contrario”, señaló.
Putin recordó que el fallecido líder norcoreano Kim Jong-il ya le dijo en 2001 que Pionyang tenía armas nucleares y que podían alcanzar Seúl con ayuda de simples sistemas de artillería.
“Aquellos que intentan hablar con Corea del Norte desde una posición de fuerza sólo refuerzan al régimen norcoreano”, comentó.
Y resaltó que el polígono militar en el que los norcoreanos hacen ensayos nucleares y con misiles se encuentra a unos 200 kilómetros de la frontera rusa, lo que preocupa al Kremlin no menos que a la Casa Blanca, “si no más”.
Asimismo condenó las acciones de Corea del Norte dirigidas a violar los acuerdos contemplados en las correspondientes resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
También aseguró que “prácticamente” no hay intercambios comerciales entre Moscú y Pionyang, y estimó en 40 mil las toneladas de crudo que Rusia suministra a ese país cada trimestre.