El despido de la periodista “hace estallar asuntos vinculados a la transparencia de los medios de comunicación, no es un tema entre privados al tratarse —la emisora MVS— de una concesión pública” , y “podría tener visos de ser una forma sutil de acallar una voz crítica”, dijo Lanza en alusión a un comunicado del gobierno que dijo los despidos son un “conflicto entre particulares” .
El Relator especial , dijo en un foro, que el caso “deja muchísimas dudas porque la empresa aparentemente pidió que la noticia no saliera por MVS” , dijo en referencia al descubrimiento realizado por el equipo de investigación que coordina la periodista de una vivienda de lujo propiedad de Angélica Rivera, primera dama, que se la adquirió a un contratista beneficiado por la administración de su marido, el Presidente Enrique Peña Nieto.
El conflicto comenzó cuando la emisora MVS despidió a los reporteros Daniel Lizárraga e Irving Huerta, del equipo de investigación de Aristegui, a quienes acusó de hacer un uso indebido del nombre y los logotipos de la compañía durante la presentación de Mexicoleaks, una plataforma que permite que se filtren documentos a un grupo de periodistas de manera anónima.
Lizárraga, reportero del equipo de Arístegui responsable de la participación del programa en la plataforma, dijo el lunes que “a mí nadie me dijo no lo hagas”.
“De acuerdo al proyecto que me aprobaron yo estaba dotando de mejores contenidos al programa” , agregó.
Tras los despidos Aristegui solicitó a la empresa que los readmitiera pero la emisora reaccionó explicando que el motivo de los despidos era la “pérdida de confianza” en ellos y despidió también a la periodista alegando que no permitía exigencias de sus empleados.
El conflicto está abriendo un intenso debate sobre el estado de libertad de expresión en México.
Se han registrado manifestaciones de hasta 2 mil personas en apoyo de los periodistas despedidos.
Lanza también afirmó durante su intervención en el evento que la violencia contra periodistas y comunicadores se ha cobrado siete vidas en México en el 2014 “con un patrón muy claro: el crimen organizado trata de silenciar a quienes informan, muchas veces en connivencia con las autoridades”.
Darío Ramírez, organizador del foro, afirmó que en México “hay censura en el estado anímico de los reporteros que salen a las calles con un alto grado de miedo”.
