La Patrulla Fronteriza halló al menor el martes en la localidad fronteriza de Welasco (Texas) , escondido entre matorrales y junto a un grupo de trece indocumentados, que fueron detenidos.
“En el momento de la detención, los inmigrantes informaron a los agentes que el niño había llegado solo a los Estados Unidos y que los traficantes lo abandonaron a la orilla del río. Cuando el grupo se percató de su presencia, uno de los inmigrantes decidió hacerse cargo de él”, relató en un comunicado el cuerpo fronterizo.
El niño, en buen estado de salud, llevaba una cartilla de vacunación hondureña y un pedazo de papel con contactos telefónicos que permitieron localizar a sus padres.
La semana pasada, la Patrulla Fronteriza reportó un caso muy similar: una niña salvadoreña de dos años había sido abandonada a la orilla del río y un grupo de indocumentados se había hecho cargo de ella hasta que los agentes los encontraron.
En esa ocasión, la niña llevaba su partida de nacimiento y una camiseta con su nombre y un número de teléfono estadounidense que permitió ponerse en contacto con su madre, quien afirmó que un “amigo” estaba encargado de entregársela.