Ucrania cumplió una semana bajo el asedio de las tropas del ejército de Rusia. Esto ha provocado todo tipo consecuencias graves y fatales, sobre todo en la población, que día tras día está buscando la forma de sobrevivir ante los peligros incesantes del conflicto.
Los ucranianos se han visto en la necesidad de tomar medidas extremas para sobrevivir a los confrontamientos, desde albergarse en refugios antiaéreos, escapar por la zona este del país, o mantenerse en su hogar, con la esperanza de que los ataques del ejército ruso como disparos o bombardeos no lleguen hacia donde están.
Las áreas más afectadas de Ucrania han sido su capital, Kiev y Járkov, la segunda ciudad más poblada del país, que han sufrido los ataques más duros del gobierno ruso. Pero, ¿qué sucede en otras áreas de Ucrania donde el conflicto no ha escalado tanto?
Dmytro Emerenko, ciudadano ucraniano que se encuentra en una de las ciudades centrales de Ucrania, Kropevnitski (antes llamada Elisavetgrado y luego Kirovogrado), brindó una entrevista exclusiva a Prensa Libre para comentar la situación que se vive en estos momentos en su tierra natal.
Civiles bajo alerta
Emerenko cuenta que Kropevnitski, (ubicada a 4 horas de Kiev) no solamente está siendo custodiada por las autoridades locales, sino por un grupo de voluntarios que realizan jornadas de patrullaje ante cualquier señal de peligro.
“La llamada ‘Teritorialna Oborona’ son grupos que están formados por voluntarios que han manifestado su deseo de apuntarse al patrullaje diario y protección de las calles como suele hacer la policía. Pueden estar armados y la mayoría de ellos han recibido entrenamiento militar”, explica Emerenko.
Mencionó que las acciones que está tomando el gobierno de su ciudad ante la problemática actual han funcionado de manera correcta, los mantienen constantemente actualizados de lo que está ocurriendo en otras regiones de Ucrania y las autoridades locales han desempeñado un papel importante para hacer sentir a la población segura.
“Hemos confiado mucho en nuestro ejército, que ha sido nuestro principal recurso de esperanza, nuestra moral se mantiene fuerte gracias a ellos, a nuestro presidente y a nuestros hermanos ucranianos que defiende este territorio”, dice el ucraniano.
Dado que las tropas rusas aún no han pasado cerca de su territorio, la logística y organización de Kropevnitski se ha mantenido. Sin embargo, Emerenko detalla que la población ha estado en constante alerta ante cualquier amenaza.
“Las alarmas antiaéreas han aumentado durante estos días, la gente está obligada a no dormir por el sonido incesante de las alertas, el ambiente siempre es alarmante”, narra el joven.
Dmytro ha tenido que esconderse en el edificio donde vive actualmente y en los “save floors” que se encuentran afuera de los apartamentos para resguardarse ante un posible ataque.
Temor e incertidumbre
Con respecto al ambiente y a la motivación que vive en Kropevnitski, Emerenko dice: “Hasta el momento solo puedo decir que no hubo pánico mostrado públicamente, tanto de nuestras administraciones locales ejecutivas representadas por el titular de la Administración Regional del Estado como del municipio de la ciudad. Parece que el jefe de la Administración Regional del Estado está demostrando ser una buena opción en estos tiempos de guerra”, comenta.
La comunidad de Kropevnitski espera que el conflicto que se vive actualmente llegue pronto a su fin. “Lo único que pensamos a partir de ahora es cuándo terminará la guerra y qué vendrá después. Todos simplemente temen ser bombardeados y que el gobierno y el ejército sean dominados en el panorama general”.
Kiev, la zona más golpeada
Dmytro tiene muchos conocidos que se encuentran en las ciudades más golpeadas por el conflicto armado, como es el caso de Kiev, la capital del país. El joven ucraniano relata cómo ha estado en contacto con varios conocidos y cuál es el ambiente que atraviesan estas ciudades que han sido atacadas por Rusia.
“Por lo general estoy recibiendo constante información sobre su bienestar, lo que ven y lo que sienten. Algunos de ellos tienen mucho miedo, su día a día es nada más correr y esconderse. Se mueven entre su hogar y los diferentes refugios que hay en Kiev”.
Debido a que la capital es bastante amplia en su territorio, muchos de sus amigos han tenido experiencias diferentes por el conflicto.
“Uno de mis amigos tuvo que irse de su casa ubicada en Obolon, al otro lado de Kiev durante los dos primeros días de la guerra, hasta que el ejército liberó Obolon y pudo regresar, pero solo para empacar sus cosas”, dice.
Atisbo de esperanza
Dmytro, a pesar de las adversidades que está enfrentando su país, dice que mantiene un espíritu firme y tranquilo.
“En el fondo todavía estamos tratando de entender la situación, ya que todavía nos resulta increíble. Todos estamos destrozados por el hecho de que alguien está tratando de tomar nuestro hogar”.
Finalmente, Dmytro mostró mucho orgullo por la lucha que está soportando su país, y espera que el conflicto acabe lo más rápido posible.
“Todo lo que puedo decir es que Ucrania es poderosa en este momento, lista para defenderse y ya ha tenido mucho éxito al hacerlo. También está siendo apoyada por el mundo civilizado. Aún así, espero que esto se termine lo más rápido posible ya que mucha gente está muriendo”.