Los senadores votaron más tarde sobre el tema y decidieron que sí es constitucional el “impeachment” a Trump, por 56 votos a favor y 44 en contra.
Consciente de que los demócratas no tienen los votos para condenar a Trump al término del juicio político (“impeachment”) que empezó este martes en el Senado, Castor protagonizó un alegato deslavazado y a ratos incoherente, como si supiera que lo que dijera no influiría en el resultado del proceso.
“Los senadores de Estados Unidos son gente extraordinaria, en un sentido técnico”, dijo Castor al comienzo de su discurso de 48 minutos.
Después de dedicar un buen rato a alabar a los cien miembros del Senado que ejercen como jurado en el juicio político, Castor siguió emitiendo pensamientos inconexos, que en ocasiones parecían improvisados, y solo hacia el final de su alocución articuló un alegato más coherente.
“No está haciendo ningún argumento. No tengo ni idea de lo que está haciendo. ¡No tengo ni idea de por qué está diciendo lo que dice!”, comentó Alan Dershowitz, que fue uno de los abogados de Trump en su primer juicio político ante el Senado hace un año, en declaraciones a la cadena conservadora Newsmax.
Estrella en Twitter
El nombre de Bruce Castor se convirtió en tendencia en Twitter mientras muchos se preguntaban adónde quería ir a parar con su divagación.
Muchos en la red social lo compararon con el protagonista de la película “My cousin Vinny” (1992), una comedia sobre un abogado novato que defiende de forma peregrina a sus primos, y el título de ese filme también se convirtió en tendencia en Twitter.
Fuentes cercanas a Trump aseguraron al diario The New York Times y la cadena NBC News que el objetivo de Castor era simplemente “rebajar la temperatura” en el pleno del Senado después del contundente alegato de los “fiscales” del juicio político, que son nueve legisladores demócratas de la Cámara Baja.
El propio Castor reconoció al final de su discurso que la defensa de Trump había “cambiado su estrategia” en esta sesión debido a la eficacia de los argumentos de los demócratas.
Castor, conocido por haberse negado a procesar al cómico Bill Cosby cuando era fiscal federal en 2005, intentó justificar así el hecho de no haber hablado apenas de la cuestión que centraba el debate en la sesión inaugural: la de si es constitucional juzgar políticamente a Trump a pesar de que ya abandonó el poder.
Después de Castor le llegó el turno a otro abogado de Trump, David Schoen, quien hizo un alegato más centrado, aunque también suscitó algunos comentarios en Twitter por su tono enfadado.
“Este juicio desgarrará a nuestro país, quizá como solo hemos visto una vez antes en la historia de Estados Unidos”, advirtió Schoen.
Se espera que el juicio político se desarrolle rápido, con un posible final la próxima semana, y es improbable que termine en una condena para Trump, puesto que para ello se necesitaría un mínimo de 67 votos (dos tercios del Senado), y los demócratas solo controlan 50 escaños de la cámara.