“Vimos que el perrito fue arrastrado unos 91 metros, pero no sabemos desde qué distancia lo traía así la mujer”, dijo Brandon Sanders, uno de los ciclistas que encaró a la mujer.
“Las patitas del perro estaban totalmente ensangrentadas”, agregó Sanders, quien junto con una amigo siguió a la mujer hasta su casa y logró avisar a la Policía, según consigna The Epoch Times.
Lo más indignante vino después. La mujer, identificada como Elaine Rosa, no mostraba ningún remordimiento ni tenía idea de lo que había sucedido, de hecho dijo que el perro ni era de ella.
Sin embargo, lo que más enojó a los amantes de las mascotas es que la mujer es psicóloga y trabaja en una prisión estatal, por lo que están escribiendo simultáneamente al director de la penitenciaría para que sancione a la mujer.
El perrito, llamado Zebra, fue finalmente recogido por una oficina de control de animales y devuelta a su dueño mientras la policía abrió un proceso contra la mujer.