El pasado 9 de noviembre los grupos independentistas catalanes Junts pel Si (62 escaños) y CUP (10) unieron sus votos para que la Cámara regional de Cataluña aprobara con mayoría absoluta una resolución de inicio de un proceso secesionista.
Apenas dos días después el Gobierno español recurrió la iniciativa al TC por considerar que esa moción va contra el ordenamiento constitucional, al atentar contra la unidad del Estado.
El TC acordó inmediatamente admitir a trámite esa impugnación, lo que supuso la paralización del proceso durante un plazo máximo de cinco meses, para permitir a los magistrados analizar en detalle la impugnación del Ejecutivo español.
Sin que haya transcurrido un mes el pleno del alto tribunal aceptó hoy el recurso del Gobierno contra el proceso separatista catalán.
El deseo de los nacionalistas catalanes de impulsar un proceso independentista ha protagonizado el último año de la política española y será uno de los temas relevantes durante la campaña para las elecciones del 20 de diciembre, de las que saldrá un nuevo Gobierno.
El “no” a la independencia aumenta ligeramente su ventaja
El “no” a la independencia aumentó ligeramente su ventaja sobre el “sí” en el último mes entre los ciudadanos de Cataluña, según un sondeo publicado este miércoles por el instituto demoscópico dependiente del gobierno independentista de esta región española.
De los 1.050 encuestados por este instituto, el Centro de Estudios de Opinión, un 48,2% se mostraron contrarios a la secesión de esta región del noreste de España y un 46,6% a favor. En el mismo sondeo de octubre, el “no” tenía un apoyo del 47,8% y el “sí” del 46,7%.
Sin embargo, una amplia mayoría de los encuestados (64,1%) creen que Cataluña tiene “un nivel insuficiente de autonomía” , contra un 23,8% que entienden que la autonomía es “suficiente” y un 6,9% que opinan que tiene “demasiada autonomía” .
La encuesta también muestra como los partidos independentistas, la coalición Junts pel Sí (con partidos de izquierda y derecha) y la izquierda anticapitalista CUP, pierden apoyo respecto al sondeo de octubre, mientras sube la intención de voto en unas elecciones regionales a las formaciones antisecesión.
Junts pel Sí (Juntos por el Sí) , del presidente saliente Artur Mas, pasa del 32,3% al 31,1% mientras que la CUP, que está bloqueando la formación de un gobierno liderado por Mas, pasa del 13,6% al 9%.
Estas dos formaciones obtuvieron una mayoría absoluta de la cámara catalana (72 sobre 135 diputados) en las elecciones regionales del 27 de septiembre y un 47,8% de los votos.
En noviembre aprobaron en el parlamento una resolución lanzando un proceso de secesión en esta región de 7,5 millones de habitantes pero no consiguen ponerse de acuerdo sobre la formación de un gobierno separatista.