Ailes, de 76 años, renunció a “Fox News” el 21 de julio en medio de denuncias en su contra por acoso sexual de varias de sus colegas, entre ellas la presentadora Gretchen Carlson.
Carlson, de 50 años, quien trabajó como reportera y conductora para la cadena de tendencia de derecha desdeel 2005 hasta el mes pasado, acusó a Ailes de despedirla en represalia por rechazar sus avances sexuales y por denunciar un “severo y extendido” acoso sexual en la cadena.
La ex presentadora afirmó que cuando se quejó de que su co-conductor masculino la menospreciaba al aire, Ailes la llamaba “odia hombres” y le decía que tenía que aprender a “llevarse bien con los muchachos”.
Nueve meses antes de que Ailes la despidiera, él respondió a sus acusaciones diciéndole: “Creo que tú y yo deberíamos haber tenido una relación sexual hace mucho tiempo”, según precisa la demanda.
Los abogados de Carlson dijeron que al menos otras 20 mujeres en Fox y en otros lugares respaldaron las acusaciones con denuncias propias.
Jefe de campaña de Trump niega pagos
El líder de campaña del candidato republicano Donald Trump, Paul Manafort, negó haber recibido pagos en efectivo y secretos durante sus trabajos con el expresidente prorruso ucraniano Víktor Yanukóvich.
“Toda sugerencia de que acepté pagos en metálico no tiene fundamento, es estúpida y sin sentido” , explicó en un comunicado Manafort, que acusa al diario de “falsamente” acusarle de recibir ese dinero.
El diario “The New York Times” publicó hel maertes un artículo en el que asegura que Manafort estaba en una lista de pagos en sobres mantenida por el Partido de las Regiones del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich, aliado del Kremlin.
La lista, que no queda claro si refleja pagos desembolsados, forma parte de una investigación de la Oficina Anticorrupción en Kiev sobre contabilidad secreta del partido del expresidente Víktor Yanukóvich.
En ella aparecen supuestos pagos en efectivo a Manafort entre el 2007 y el 2012 por un valor de 12.7 millones de dólares, lo que eleva los temores sobre los intentos de que el gobierno del presidente ruso, Vládimir Putin, pueda interferir de algún modo en los comicios estadounidenses de noviembre.
Manafort aclaró hoy que todos lo pagos que ha recibido durante su trabajo en Ucrania fueron para “todo el equipo político: personal de campaña (local e internacional), encuestas e investigación, integridad electoral y anuncios de televisión” .
Los vínculos de Manafort con el exlíder ucranio, reemplazado por un gobierno proeuropeo, están siendo examinados, especialmente después de que Trump sugiriera que reconocería la anexión rusa de Crimea si llegara a la presidencia.
Rusia invadió y se anexó la península ucraniana en el 2014 tras la violenta salida de Yanukóvich.
Manafort volvió a negar que haya “trabajado para los gobiernos de Ucrania o Rusia”, aunque no detalló sus contratos con el Partido de las Regiones más allá de apuntar que sus operaciones en Ucrania “cesaron tras las elecciones parlamentarias de octubre”.