En contraste con las declaraciones públicas del aspirante a la nominación presidencial del Partido Republicano, quien ha dicho que el cambio climático es un “engaño” y un “mito”, los líderes de todos los aliados de Estados Unidos apremian a que se realicen acciones para reducir las emisiones de gases que generan el llamado efecto invernadero, incluidos los de Gran Bretaña, Alemania, Francia, Japón y Canadá.
El presidente chino Xi Jinping, líder de la nación más poblada del mundo y la principal emisora de carbono, ha hecho un llamado a que a la larga se dejen de utilizar las plantas generadoras de electricidad que utilicen carbón mineral como combustible, y está encabezando un ambicioso esfuerzo nacional para construir conjuntos masivos de paneles solares y turbinas eólicas.
El aislado régimen del dictador norcoreano Kim Jong Un firmó el año pasado el acuerdo de París y está implementando una acción de 10 años con el fin de plantar bosques nuevos como parte de un “esfuerzo nacional para mitigar el cambio climático a partir de la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Incluso los líderes de naciones económicamente dependientes de la comercialización del petróleo aceptan también la realidad de que el clima del planeta se está calentando, incluido el presidente ruso Vladimir Putin y el rey saudí Salman.
“Al ser sumamente vulnerable al cambio climático y a las acciones y planes para enfrentarlo, el Reino de Arabia Saudí se involucrará en varias acciones para hacer frente al cambio climático y hacer que su desarrollo sea más sustentable”, señaló el Estado saudí en un comunicado emitido el año pasado.
Trump, mientras tanto, ha prometido “renegociar” los compromisos de Estados Unidos bajo el acuerdo de París y ha insinuado que la ciencia que respalda la veracidad del cambio climático forma parte de un complot para debilitar la economía estadounidense.
A través de sus redes sociales el año pasado, Trump indicó que “el concepto del calentamiento global fue creado por y para los chinos a fin de hacer que las manufacturas estadounidenses no sean competitivas”, tuiteó Trump en 2012.
También expuso que el cambio climático es “una mentira muy cara”, ya que el planeta “se está congelando.
Además, en una entrevista con la cadena CNN añadió que “no creo en el cambio climático. Es siempre el tiempo. Y así ha sido durante mucho, y además, la verdad, el tiempo cambia”.
El magnate neoyorquino también ha afirmado que de llegar a la Presidencia de EE. UU., retiraría los fondos destinados a combatir el cambio climático.
